Se impulsan programas ambientales en Morelia: Iván Rodríguez
Detalla el secretario de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Morelia las acciones que se desarrollan en torno a los programas “Menos Pilas más Conciencia”, “Reciclotrónicos” y “No más chicles en el piso”
Morelia, Michoacán, 03 de febrero de 2014.- Cumplir con la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), fomentar entre la población la responsabilidad compartida por el cuidado del medio ambiente y alentar prácticas de separación de residuos considerados peligrosos, son acciones cotidianas que implementa el Ayuntamiento capitalino, al frente de Wilfrido Lázaro Medina, con programas como “Menos Pilas más Conciencia”, “Reciclotrónicos” y “No más chicles en el piso”.
Bajo la administración del presidente municipal Wilfrido Lázaro Medina, sumar voluntades con la ciudadanía implica toda una estrategia de trabajo en favor del desarrollo de Morelia, en donde en el tema de la sustentabilidad se ha privilegiado la participación de instituciones educativas, la iniciativa privada y los morelianos en general para realizar jornadas de limpieza, mejoramiento de espacios públicos y el impulso de la cultura de reducir, reusar y reciclar, esto mediante la impartición de cursos en escuelas, colonias y comunidades.
Estas prácticas son instrumentadas y difundidas por la Secretaría de Servicios Públicos, a cargo de Iván Rodríguez Medina, específicamente a través de la Dirección de Aseo, la cual promueve el programa “Menos Pilas más Conciencia” para lograr la separación de estos artículos considerados peligrosos por contener sustancias como níquel, cadmio, mercurio y plomo, mismas que al ser liberadas por ciertos factores ambientales y luego de haber cumplido su vida útil, provocan una gran contaminación que se puede disminuir al bloquear los polos con cinta adhesiva al momento de almacenarlos.
Durante 2013 se acopiaron aproximadamente 6.5 toneladas de pilas, tan sólo en los contenedores instalados específicamente en el municipio para tal fin y los cuales se encuentran en dependencias de gobierno federal, estatal y municipal, en las administraciones de los mercados municipales y plazas comerciales, en las tenencias, la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) y los centros comerciales.
La empresa Ambiental Michoacana es la encargada de recolectar y transportar las pilas a su destino final, en donde se extraen los diferentes metales que las componen, después se trituran y los residuos son reutilizados o en su caso sepultados en un relleno sanitario que funciona bajo estándares federales. Cabe destacar que en los meses de Diciembre y Enero se reúne el 40 por ciento de todo el acopio que pudiera existir en el año de estos artículos.
En cuanto a los “Reciclotrónicos”, se logra una contribución importante en el reúso de chatarra obsoleta que proviene de dispositivos como computadoras, televisiones, consolas de juegos, celulares, impresoras, videocámaras, estéreos, auto estéreos, escáners, proyectores, hornos de microondas, entre otros que han llegado al final de su vida productiva y que se pretende no dañen al ambiente ni amenacen la salud humana.
Así, al final de 2013, el Ayuntamiento recolectó 1.5 toneladas de dichos materiales en los puntos verdes que tiene la Dirección de Aseo Público en la calle Zamora esquina con Ocampo, colonia Juárez; en avenida Madero poniente 2783-A, colonia Los Ejidos y en avenida Periodismo 1200, colonia Agustín Arriaga Rivera, para que puedan ser reciclados conforme a las recomendaciones de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR) y la Norma Nom/052/Semarnat/2005.
Finalmente, “No más chicles en el piso” es una estrategia desarrollada para promover y fomentar la participación de la sociedad de una forma fácil, sin costo alguno y para evitar que las gomas de mascar dañen la cantera al llegar al suelo, bancas, paredes o cualquier otro lugar que no sean los rehiletes instalados en las papeleras de basura ubicadas en el Centro Histórico, pues diariamente se recolectan entre 1.5 y 2 kilos de chicles tan sólo en el primer cuadro de la ciudad.