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Los medios hoy / Temporada de focas

Pues el problema es grande, pero nadie quiere aceptar o reconocer el tamaño de la bronca. Para contrarrestar lo anterior sólo veo dos soluciones: o reducimos la población de focas o, reducimos la población humana
Pues el problema es grande, pero nadie quiere aceptar o reconocer el tamaño de la bronca. Para contrarrestar lo anterior sólo veo dos soluciones: o reducimos la población de focas o, reducimos la población humana

La siguiente columna NO va a gustar a nadie porque es la más controvertida, la más infame, la más letal, la más odiada, la más polémica, que me convertirá en la Lucerito 1.2: ¿la matanza de focas que se da cada año en Canadá es una medida adecuada?

Morelia, Michoacán, 07 de mayo de 2014.- La siguiente columna NO va a gustar a nadie porque es la más controvertida, la más infame, la más letal, la más odiada, la más polémica, que me convertirá en la Lucerito 1.2: ¿la matanza de focas que se da cada año en Canadá es una medida adecuada? Pues la sola pregunta llevaría a cualquiera a decirme que NO, y reafirmar lo que he dicho en las dos primeras líneas de esta columneja. Ver la roja sangre de las focas bebés derramada en el hielo blanco de los mares canadienses es un contraste impactante, especialmente cuando los cazadores lanzan a diestra y siniestra duros garrotazos contra los indefensos animalitos, de quienes se aprovecha piel, grasa y carne, principalmente.

Ya años atrás había visto un documental que, a diferencia de otros, incluía la opinión de los cazadores: “¿quieren seguir comiendo sardinas, anchoas, pescados? Entonces déjenos hacer nuestro trabajo”, dijo en tono molesto el pescador, que por temporadas cambia la red por el garrote.

No pude evitar pensar en nosotros como consumidores. Las cifras del año pasado, según el noticiario Foro TV, señalan que fueron 90 mil focas sacrificadas en 2013 ¿la cifra se le hace alta? Ok, ahora suponga usted que cada foca pequeña come X cantidad peces ¿le parece bien si ponemos la modesta cifra de tres kilos diarios? Ok, simplemente hay que multiplicar tres por 90 mil. Estamos hablando de 270 mil kilogramos diarios. Ahora, multiplíquelo por un mes, el resultado son ocho millones 100 mil kilogramos de pescado. Le recuerdo que la cifra sale a partir de 90 mil focas, pero la matanza que se realiza en Canadá y Groelandia abarca de 400 mil a medio millón de focas arpa al año. La cifra es dura ¿no?

Me queda claro que Canadá es un país muy ecologista y resulta en extremo contradictorio este tipo de medidas que dañan su buena imagen ante la comunidad internacional, entonces… ¿por qué hacerlo? Ok, dejemos de pensar en focas y en humanos por un momento y pensemos mejor en peces, porque ambas especies (los humanos y las focas) comen peces; entonces ¿qué hacer para aumentar o recuperar la población de peces que por la explotación industrial han mermado su población?, ¿una veda permanente e indefinida? (ajá).

Pues el problema es grande, pero nadie quiere aceptar o reconocer el tamaño de la bronca. Para contrarrestar lo anterior sólo veo dos soluciones: o reducimos la población de focas o, reducimos la población humana, pero ni una ni otra solución gustan. Una idea paralela y en exceso optimista sería adquirir conciencia colectiva (cosa que se antoja harto imposible) y reducir nuestros voraces hábitos de consumo, pero cada vez que se me viene a la mente esa sola idea no paro de reír (sí, ya sé, soy una pinche vieja sanguinaria).

EL HORROR DE NIGERIA

Son de esas noticias que por su extremo interés me despiertan en la madrugada: un grupo fundamentalista-terrorista denominado Boko Haram secuestró y, según testimonios, violó y vendió como esclavas a más de 200 niñas de una escuela de Nigeria. El único pecado de las pequeñas: estudiar. Lo curioso del caso es que el masivo secuestro se llevó a cabo el pasado 15 de abril, pero apenas hoy lo conocemos porque hace tres días se dio otro secuestro de más de 10 menores.

Ahora, con cifras más reales, con detalles y… sobre todo, con el nefasto video donde el líder de esas bestias, Abubakar Shekau que reivindica el atroz crimen, sabemos de qué se trata. Alguna información extraoficial dice que el gobierno estadounidense ha mostrado interés por ubicar y rescatar a las menores, ojalá así sea. Este tipo de novedades me recuerdan que el infierno sí existe.

¡Y MIRELES APÁ?

Hablando de abusadores (y en este caso no se trata de Cuauhtémoc Gutiérrez), el doc Mireles dejó boquiabierta a Carmen Aristegui cuando sin empacho alguno le confesó ayer en entrevista que tenía una novia de 17 años. El doc Mireles es un hombre que por sus más de 50 años ya forma parte del club de los carcamanes y rabo-verdes, y la verdad se vio muy mal con su confesión. Tache para Mireles (y para los que me tiran los perros inbox).

POLICÍA BUENO POLICÍA MALO

Los policías que se manifestaron ayer también son personas, tienen (o tenían) derechos, obligaciones, un sueldo muy bajo y aguantan mucho, pero hoy las cosas han cambiado y poco a poco los han cambiado. Me imagino que mientras se manifiestan frente a palacio les pasa por la mente si algún día estarían en el lugar donde ellos presenciaron infinidad de veces a los manifestantes que también se plantaron. Ojalá se atienda su caso, porque eso de despedir gente de más de 20 años de servicio solo por “no aprobar los exámenes de confianza” como que no va.

¿NUEVO GRUPO CRIMINAL?

Simplemente no lo creo, es la misma gata, nada más que revolcada y chapeteada. Últimamente a los criminales como que les da el ponerse nombres muy jocosos, especialmente los cárteles michoacanos; si antes eran la Familia Michoacana (primera hermandad), con cuyo nombre pretendían mostrar un rostro amistoso, luego se llamaron Caballeros Templarios (segunda hermandad), igualmente para vender la idea de protectores. Pues ayer me entero del presunto nacimiento de… la Tercera Hermandad o H-3 (woooow); no cabe duda que al amigo que se inventó semejantes nombres le hace falta más de un tornillo en la cabeza o de plano leyó harta historieta cuando iba a la peluquería.

¡¡¡Buen miércoles para todititititititooooooooooooos!!

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