Acusan a Cristina Portillo de hacer negocio con uniformes de Telebachillerato
Casi de manera obligada, la titular del subsistema presiona a docentes y alumnos para comprar uniformes con un proveedor único, mismo al cual se puede localizar ciertos días en las oficinas de la Dirección General
Morelia, Michoacán, 12 de septiembre de 2022.- Algo huele mal en el Telebachillerato de Michoacán, donde se acusa a la directora general, Cristina Portillo Ayala, de pretender lucrar con los uniformes de docentes y alumnos.
De acuerdo con los denunciantes, una vez que arrancó el ciclo escolar la ex diputada local y federal “propuso” a través de los grupos de WhatsApp que se cambiaran los uniformes de profesores y estudiantes de la institución.
A algunos de los maestros les pareció mal que la idea se informara una vez que ya habían comenzado las clases, mientras que otros estuvieron de acuerdo, con la intención de homogeneizar los uniformes en todo el estado.
De esta forma, algunos de los integrantes de los grupos solicitaron los datos para mandar hacer los uniformes en las diferentes regiones del estado, sin embargo, Cristina Portillo se habría opuesto a ello, argumentando que ya tenía listo al proveedor único de las nuevas indumentarias.
Incluso, habría señalado que dependiendo del día en que profesores y alumnos pudieran acudir a Morelia podrían encontrar al mencionado fabricante en las oficinas de la Dirección General de Telebachillerato.
Lo anterior despertó las sospechas de muchos, toda vez que el costo del uniforme completo rondaría los 745 pesos, los cuales multiplicados por 6 mil alumnos a lo largo y ancho del estado da a entender que esta propuesta no es más que un jugoso negocio de casi 4.5 millones de pesos.
Incluso, si sólo una cuarta parte de los alumnos compraran la indumentaria, el ingreso para el fabricante superaría el millón de pesos.
Además, se recalca que la gran mayoría de los estudiantes del subsistema son de bajos recursos y al costo del uniforme se le tendrían que sumar los gastos de traslado a Morelia para recogerlo.
De acuerdo con los denunciantes: «No hay día en que no publique algo respecto a los uniformes. Ella y su equipo de trabajo han sido muy insistentes en la adquisición de los mismos. Aunque no es una obligación, insisten mucho en que los compremos».
Además, en cuanto a los grupos de WhatsApp internos, se señala: «Los grupos que deberían de utilizarse con fines académicos y administrativos se han convertido en un verdadero tianguis. Es una vergüenza que la Directora los haya convertido en eso”.
«En efecto, nos dicen que no es obligatorio; pero como si lo fuera. Han llegado al extremo de enviarnos formularios de Google -realizados por el mismo personal de Dirección- para publicitar la «mercancía» de la Directora. Eso ya es estar usando recursos públicos para fines personales y no se vale», concluyeron.