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Al gobierno en reforestación le interesa la estadística no los resultados

Expertos critican la falta de acción en ecología y reforestación; el 30% de reservas forestales se ha perdido

Morelia, Michoacán, 05 de agosto de 2024.- Para lograr una reforestación exitosa no es cuestión de fe. Dicen que plantar cuando menos un árbol es un deber en la vida, pero lograr que sobreviva 20 es como tener un hijo: requiere atención, dinero, tiempo, disposición y conocimientos durante años. Para reforestar un bosque muerto, quemado, talado o degradado el conocimiento técnico en materia forestal es básico. Cuantas veces y en cuantos años. Se ha desatendido la ecología pese a que ha perdido el 30 por cierto de las reservas forestales y que el 70 por ciento de los cuerpos de agua están contaminados”, arremetiendo; “Poco o nulo caso han hecho autoridades de los distintos niveles a observaciones y acciones en materia medioambiental.

En un reportaje publicado por Carlos Carabaña reportero. Integrante de la Unidad de Investigación del diario ‘El Universal’ en México en el el the Washington Post Sembrando Vida: escribe que es uno de los programas sociales que el gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, puso en marcha en cuanto juró el cargo. Lo presume como “el mayor programa de reforestación del mundo” y llegó a aturdir sobre que el acuerdo contra la deforestación que firmaron más de un centenar de países en la Conferencia sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP26), en Glasgow, fue propuesto por México e inspirado por Sembrando Vida. Asegura el reportaje publicado en el el the Washington post. En esa misma cumbre subraya el reportero, la secretaria de Medio Ambiente, María Luisa Albores, aseguró que “Sembrando Vida cubre aspectos sociales, productivos y ambientales frente a la mitigación del cambio climático”.

Frente a las declaraciones oficiales triunfalistas, a casi los seis años del programa se acumulan las evidencias de que sus aspectos ambientales y contribución a la lucha contra el cambio climático son cuestionables. Se han publicado ya diversos reportajes que muestran que parte de Sembrando Vida —que da 5  mil pesos al mes (250 dólares) a casi medio millón de pequeños agricultores para sembrar milpa, y plantar árboles frutales y maderables en dos hectáreas y media de terreno— contribuye a la deforestación y pérdida de coberturas forestales.

Decenas de solicitudes de información a la Secretaría de Bienestar, les a sido bloqueadas el acceso a lo mismo que a otros investigadores o institución independiente. Solo pueden obtener la ubicación de las de Quintana Roo porque, cuando se busca las otras, habían puesto se asegura un amparo contra la entrega de esta información.

Ante tantas evidencias, el gobierno federal debería aceptar que el programa solo tiene un carácter social y productivo, y dejar de usarlo como escudo cuando critican su política ambiental. También, en lugar de negar sistemáticamente las críticas, sería buena idea que se inicieuna investigación oficial de los puntos fuertes y débiles de Sembrando Vida, y corregir sus posibles errores antes de exportarlo a Centroamérica. Los bosques y selvas de la región lo agradecerán.

Como en Michoacán también hace aire, el pasado 16 de julio el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla dio inicio a la jornada de reforestación en Michoacán arrancó en esa fecha oficialmente donde se prevé la plantación de por lo menos 10 millones de árboles, la cual tiene como prioridad sembrarlos en las zonas afectadas por los incendios forestales, el  titular de la Secretaría del Medio Ambiente (Secma), Alejandro Méndez López ex director de la Comisión Forestal del Estado y ex legislador del PV se sumó a estas declaraciones al afirmar que se tiene una deuda histórica con estos sectores debido a que «son una muestra clara de cómo hay que cuidar la masa forestal».

Asimismo, resaltó el papel que juegan los árboles en la naturaleza porque son «los que más servicios nos han brindado como limpiar el carbono, madera para combustibles, incluso, material para construir casas«.

Se ha  denunciado hasta el hartazgo por parte del consejo estatal de ecología” que incluye al mismo Alejandro Méndez y otros organismos de la sociedad civil sobre el deterioro ambiental. Han sido infinidad de ocasiones publicado en todos los diarios escritos, en radio y televisión, en las redes ¿Qué les parece?. Pero algo persiguen los apóstoles ecológicos! y si no revisen que funcionarios han despachado en las dependencias de ese sector y que alguna vez escandalizaban con las declaraciones que vertían como defensores ecologistas.

La Comisión Forestal de Michoacán advirtió en junio del 2018 que un predio deforestado se logra reponer con esfuerzo, no obstante, destacó que una superficie que ya fue víctima del cambio de uso de suelo difícilmente regresará a ser bosque o selva baja nuevamente.

Son los monocultivos como el aguacate y las berries, el pastoreo de animales y el crecimiento exponencial de las grandes ciudades los elementos que han generado la mayor cantidad de daños. Reiteramos lo que se viene escuchando desde hace décadas y a 3 años del cambio de administración, esta igual o peor en indolencia apatía e irresponsabilidad, han existido gritos casi en todos los círculos sociales, sin embargo al parecer se encuentran gobierno, productores, autoridades del ramo y algunos otros bichos ante la observación de los gobiernos de los estados unidos y Canadá

Según expertos en la materia forestal, Michoacán durante la última década, ha perdido alrededor de 350 mil hectáreas de bosques, cifras de acuerdo con un análisis de la Comisión Forestal del estado, lo que significa que prevalece la misma tendencia de los más de tres quinquenios anteriores.

El director forestal en la administración del desmañado Leonel Godoy Rangel, Alejandro Méndez López, de extracción del partido verde ecologista y el cual hizo declaraciones temerarias zantes en su papel de ecologista que como muchos otros con esa bandera, lo que buscan es colocarse en el gobierno y aprovechar viviendo del erario.

Pues el inventario forestal, decía el además notario Méndez López, contenía estadísticas oficiales, pero dogmatizaba que cada año se seguían perdiendo unas 40 mil hectáreas de bosques. Sucedió que ya como director olvidó su misticismo y aporto casi nada y conste que declaraba sobre el tema con insistencia cuando vestía como diestro del bosque, decía entre otras palabras: “el bosque es fuente de bienestar para los michoacanos”, destacaba que el sector forestal de la entidad tiene un enorme potencial, que debe ser aprovechado de manera sustentable y con equilibrio, bajo el ordenamiento oficial de los tres niveles de gobierno, supervisado claro por miembros de su partido.

Dijo también lo siguiente ya como flamante director Forestal en funciones; que la tarea de proteger al sector forestal es de todos y manifestó la necesidad de superar los factores que lo amenazan, como es el caso de los desmontes agropecuarios. Como ha sido costumbre, no es lo mismo ver los toros desde la barrera y chiflar, que enfrentar y/o corriges las cosas o bien caen en la adulación y tentación, por lo cual este personaje, no aportó nada significativo en el tema forestal. ¿Qué fue lo que le paso?.

Nos dimos a la tarea de pedir opinión a técnicos en la materia sobre los 10 millones de plantas que anuncio el ciudadano gobernador Ramírez Bedoya y coincidieron en que era difícil creer que existiera ese número de árboles, decían, hay que tomar en consideración que la mayor parte del año, la comisión forestal estuvo casi paralizada, recursos no los hay y el ex titular Rosendo Caro Gómez, hiso caso omiso de que le tuvieran tomadas los empleados las oficinas porque siempre ha sido un simulador irresponsable.

El ejercitado profesionista experto en la materia,  Víctor Hugo García Garrido integrante de la Asociación de profesionistas forestales, más optimista ilustro entre otras importantes indagaciones, como irrelevante exista o no el número de plantas, más bien por la experiencia que tiene de muchos años en el tema de reforestación, opto por recomendar que es prioritario en principio ubicar las arreas correctas para las plantaciones en suelos de vocación forestal, estudios previos y convenios con los campesinos, el tipo de especies adecuadas en coherencia con la vocación del suelo, el desarrollo genotípico de la planta, el número y distancias al plantar, las dimensiones de las cepas, el manejo cultural de protección, llevar un control de los grados de sobrevivencia pues en ocasiones en el puro transporte de la planta se deteriora hasta un 30 por ciento, considerar los pronósticos del tiempo entre otras importantes actividades para garantizar el crecimiento de la masa forestal, reforestar no es tan sencillo como se hace creer.

En cuanto al tema del programa sembrando vida en el estado, no se habla mucho debido a la falta de información para que se pueda emitir una opinión, de ello no se sabe gran cosa, aunque existen responsables del programa en Michoacán, hay quienes coinciden en señalar que ha sido un fracaso y mucho hermetismo por lo mismo.

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