El sur del país avanza a pasos agigantados
Han transcurrido, con mayor exactitud, siete meses de tomar protesta como gobernador constitucional de Chiapas. Hablamos de Eduardo Ramírez, que reemplazó a Rutilio Escandón como titular del ejecutivo estatal.

Morelia, Michoacán, 09 de junio de 2025.- Han transcurrido, con mayor exactitud, siete meses de tomar protesta como gobernador constitucional de Chiapas. Hablamos de Eduardo Ramírez, que reemplazó a Rutilio Escandón como titular del ejecutivo estatal. Eso significa, en efecto, que hubo continuidad del proyecto de transformación, eso sí, con mayores resultados desde el arranque de las actividades administrativas.
De hecho, la llegada del actual mandatario ha traído efectos inmediatos, sobre todo el flujo de desarrollo económico que dependen del estado, pero también de la voluntad que existe del gobierno federal. En esa coyuntura, que ha encontrado canales de comunicación eficientes y una relación sólida de coordinación, se ha trabajado una agenda integral que, mucho tiempo atrás, se venía elaborando para mejorar la calidad de vida de la población civil.
La misma distribución de los recursos a los asuntos más prioritarios del estado, en virtud de la propia demanda de la ciudadanía, se han canalizado en seguridad, obra e infraestructura, sin olvidar el tema de la educación y todos los elementos que han puesto a disposición de los niveles para elevar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Muestra de ello, desde luego, fue la instalación de la primera Universidad Rosario Castellanos en municipios que, por su relevancia, fueron pioneros de esta propuesta formativa que impulsa Claudia Sheinbaum.
Eso, sumado a los buenos oficios de gestión de Eduardo Ramírez, han posibilitado una nueva transición en el universo del conocimiento. En efecto, esas metas que se han trazado dan cuenta de cómo Eduardo Ramírez ha hecho frente a ese rubro sustancial. Vemos que eso, todavía más, se reforzará con el acuerdo firmado con el Fondo de Cultura Económica, para multiplicar lo relevante que es el fomento a la lectura.
Y qué decir de la estrategia de seguridad, que ha puesto principal acento para salvaguardar a la población civil. Eso, por un lado, ha traído más tranquilidad y, de paso, contribuyó en esa pacificación que, en tiempos de campaña, pronunció Eduardo Ramírez como una prioridad que focalizaría. De hecho, se conformó una nueva estrategia que ha permitido, entre muchos aspectos positivos, un mayor despliegue territorial de elementos. Todo ello, a la par de los resultados, se percibe que ha venido disminuyendo los registros de otras administraciones de forma significativa.
Entonces, lo que antes era una preocupación constante, se ha convertido, por mucho, en una de las acciones que más aplaude la sociedad. Hoy en día existe mayor tranquilidad para atraer inversionistas que han puesto el ojo en el potencial que tiene un corredor como la frontera de Chiapas. Es, lo ha dicho el propio Ramírez, un polo de desarrollo económico que, como tal, se ha convertido en una fuente de oportunidades, especialmente para generar empleo.
Por eso, Chiapas, de acuerdo con las evaluaciones que miden el desempeño, ha alcanzado un punto de estabilidad. El propio Eduardo Ramírez, calificado como el mejor gobernador de México, tiene una participación activa en todo los temas que aquejan a la población. Eso, que no es otra cosa más que tomar el timón con sus propias manos, es, como nunca antes, el preludio de una nueva ERA de transformación. El sur del país tiene un nuevo rostro gracias al desarrollo que se ve reflejado en entidades como Chiapas, qué tiempo atrás fueron marginadas y excluidas por los gobiernos neoliberales.
Ellos, que jamás se preocuparon por llevar al territorio a otras latitudes, limitaron los mecanismos de progreso. El rezago educativo, que hoy es atendido a cabalidad, en otros años estaba en la orfandad. Por eso el cambio es profundo. El mismo Ramírez, que se ha puesto la camiseta, ha dado un giro radical a las políticas públicas. Hoy, ha quedado comprobado, Chiapas está en otro nivel. Es un momento crucial el que se vive y eso, como tal, debemos resaltarlo.
Esta no es otra cosa que las ganas inmensas de ver una transformación auténtica que prometió Eduardo Ramírez en tiempos de campaña. Prueba de ello, que se ve reflejado en todos los estudios de opinión pública, es su elevada aprobación como mandatario.
Es, sin ir más lejos, el gobernador con mayor calificación positiva en México. De eso estamos conscientes todos, principalmente aquellos que, por la importancia que tiene el sur, hemos dado seguimiento puntual a este comienzo. Todo ello, lo dijimos, se puede explicar con un aspecto tan sencillo que se llama compromiso y responsabilidad, pero también amor por la tierra que te vio crecer como un referente social.