Reginaldo para gobernador de Michoacán
Para cumplir con las reglas de participación, queda claro, todos se medirán en una encuesta, incluyendo Reginaldo Sandoval

Morelia, Michoacán, 22 de septiembre de 2025.- Hace una semana, desde un inmueble de la capital del estado de Michoacán, Reginaldo Sandoval brindó un informe de actividades. Algo así como una especie de rendición de cuentas del ejercicio legislativo y la labor sustancial de la fracción parlamentaria del PT en San Lázaro. Eso, como tal, hizo que se registrará una enorme presencia de militantes y simpatizantes, pero, de igual forma, de la población en general. Estamos hablando, ni más ni menos, de uno de los máximos exponentes del Partido del Trabajo en el territorio. El rango, de liderazgo, por supuesto, hizo que la movilización y el poder de convocatoria hicieran gala en el evento. Se abarrotó. No podemos hacer un cálculo como tal, lo que sí pudiésemos afirmar, con exactitud, es que cada pasillo se llenó.
Lo más importante, además del contenido del mensaje, fue la unidad que se mostró entre los liderazgos regionales. Buena parte de esa columna vertebral, en efecto, son jóvenes que se han formado bajo la tutela de Reginaldo Sandoval. Siendo así, que no nos extrañe que, dentro de muy poco, encabecen posiciones de primer nivel. Es como una ola creciente que no se detiene. Hay bastante estructura que se ha sabido sostener, especialmente en procesos electorales. Una de las principales tareas del PT, de todas las entidades federativas, es mantener el flujo de comunicación con la población civil, sobre todo para atender las situaciones que los aquejan. A cada paso que ha dado el Partido del Trabajo, se nota, hay un incremento. Pasó en los estados de Durango y Veracruz. Este último, sin ir más lejos, se le vio el ascenso.
Hay una enorme simpatía por el Partido del Trabajo. Ha logrado convertirse en una fuerza potencialmente competitiva. En Michoacán, por ejemplo, tiene una nutrida fracción en el congreso local. Al igual, tienen presencia en la Junta de Coordinación Política y en comisiones cruciales donde se puede influir en la política de Estado. Reginaldo Sandoval, desde hace años, ha venido trabajando con los cuadros que hoy figuran en los reflectores de la prensa. Fue él, inclusive, pieza clave en las mesas de negociación con PVEM y Morena a nivel nacional. Es, sin más preámbulo, el hombre de mayor confianza de Alberto Anaya, presidente nacional del PT. Con esa batuta y simpatía, queda claro, Sandoval Flores tiene esos elementos indispensables a su favor para ir en busca de la gubernatura de Michoacán.
Supo, entre muchas otras cosas más, ganarse el liderazgo y el reconocimiento de las estructuras. El propio Alberto Anaya, de muchas encomiendas que le ha delegado, ha encontrado un aliado incondicional que, para muestra, será el abanderado de unidad del PT para el Solio de Ocampo. Por lo pronto, tendrá que esperar a que el consenso y las negociaciones fluyan. Él mismo, en efecto, seguramente formará parte del equipo negociador en las mesas de trabajo para sellar el pacto de unidad entre la coalición Seguimos Haciendo Historia. Con ese diseño o esquema, sobra decirlo, el coordinador de los diputados del PT puede encontrar la llave para allanar su paso a la candidatura. Para probar eso, basta ver lo que pasó en San Luis Potosí y en Morelos, hace algunos años. PT y PVEM, al ser parte de esta sociedad, tienen también margen para levantar la mano.
Recordemos que, por encima de cualquier aspecto, se pondrá la unidad. Para cumplir con las reglas de participación, queda claro, todos se medirán en una encuesta, incluyendo Reginaldo Sandoval. Michoacán, como sabemos, es una entidad que se cuece aparte. La lucha sin cuarteles que se ha protagonizado desde los tiempos de Cristóbal Arias, a la fecha, ha constituido un punto de inflexión. Han sido choques que, por poco, provocan la división. Eso no tendría que pasar, sin embargo, desde ese momento se rasgan las vestiduras en Morena. Por eso la decisión, de pronto, puede dar un giro preponderante y, en una de esas, Luisa María Alcalde puede ceder la estafeta para que el PT encabece la alianza en Michoacán. La clave de ellos estará en los buenos oficios que han demostrado Reginaldo Sandoval y Alberto Anaya, al operar el tema al más alto nivel.
Sin patetismos, Morena, en lo político, le debe muchísimo al PT, sobre todo en temas legislativos en los que el Partido del Trabajo ha sacado la cara y, con los votos suficientes, ha dado la mayoría calificada para reformar el marco constitucional. Eso, más que asuntos de carácter legislativo, son componentes inherentes para fortalecer la política de estado. Por eso puede verse, en un determinado momento, enroques que permitan encaminar las aspiraciones políticas del PT en la carrera por la gubernatura de Michoacán. Debe existir flexibilidad de parte de la dirigencia nacional de Morena, específicamente ahora que viene en camino el proyecto de reforma electoral. Todo ello, que también habrá de influir, repito, puede ser el punto coyuntural que, a la postre, abra el consenso y la negociación.
Y como Reginaldo ha alcanzado un liderazgo y un poder político sólido, tiene enormes posibilidades de ser el abanderado de la coalición Seguimos Haciendo Historia en Michoacán.