Gobierno federal presenta proyecto para la jornada de 40 horas en México
La reforma se alinea con el humanismo mexicano y prioriza bienestar material y espiritual de los trabajadores
Morelia, Michoacán, 03 de diciembre de 2025.- La propuesta para reducir la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas entró en una nueva fase de discusión legislativa, será a partir del 2027 cuando empiece la disminución, dos horas por año para que en 2030 se tengan 40 horas.
De acuerdo con el documento presentado este miércoles por el secretario de Trabajo y Previsión Social (STPS), Marath Bolaños, la iniciativa, que forma parte de la agenda prioritaria del gobierno federal, incorpora criterios específicos sobre el uso de horas extra, uno de los puntos que más inquietud ha generado entre empleadores y legisladores.
La propuesta establece que las horas extraordinarias serán voluntarias, es decir, quedarán sujetas a la decisión del trabajador. El esquema mantiene el límite de hasta 12 horas extraordinarias semanales, pero bajo nuevas reglas:
- No podrán rebasar 4 horas diarias ni realizarse por más de 4 días a la semana.
- El pago de cada hora extra será al doble del salario correspondiente a la hora ordinaria.
- Las personas menores de edad no podrán realizar horas extraordinarias bajo ninguna circunstancia.
Las empresas deberán llevar registros detallados de las horas ordinarias y extraordinarias realizadas, con el fin de permitir verificación laboral y evitar abusos, precisó el titular de la STPS en la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum.
La autoridad laboral explicó que la reducción de la jornada tiene como objetivo “devolver tiempo de vida a las personas trabajadoras”, mejorar la conciliación entre vida laboral y personal y avanzar hacia un modelo de bienestar “material y espiritual”.
Funcionarios de la STPS destacaron que la reforma se alinea con los principios del humanismo mexicano, orientados a fortalecer derechos laborales y elevar la calidad de vida.
Aplicación gradual: de 48 a 40 horas en cinco años
La reforma plantea que la reducción sea escalonada:
- 2026: entrada en vigor y periodo de transición.
- 2027: 46 horas.
- 2028: 44 horas.
- 2029: 42 horas.
- 2030: Consolidación plena de la jornada de 40 horas.
El secretario del Trabajo subrayó que la modificación no implicará reducción de salarios, sueldos ni prestaciones. Además, se prevé la prohibición, por primera vez, del trabajo extra para menores de edad, y se establecerá un límite de cuatro horas triples por semana, que antes no existía.
La propuesta también ordena la creación de un registro electrónico de jornada laboral, que permitirá a las autoridades supervisar el cumplimiento de los nuevos límites.
Bolaños destacó que la reforma condensa el “espíritu del humanismo mexicano”, al otorgar tiempo libre adicional sin comprometer derechos laborales.
“Con la reducción de la jornada ordinaria de trabajo de 48 a 40 horas, se hace realidad la disposición de mayor tiempo para las y los trabajadores para utilizarlo en descanso en actividades de recreación, garantizando con ello condiciones de trabajo digna y también mejora en la productividad”, afirmó.
Durante la presentación de la propuesta, el titular de Trabajo agradeció a la presidenta Claudia Sheinbaum por el respaldo político para avanzar en esta reforma. Señalaron que se trata de un esfuerzo coordinado y de largo alcance, cuyo impacto se reflejará en la productividad y en la salud de las plantillas laborales.
La presidenta explicó que el diseño de la reforma responde a un proceso de diálogo amplio y a la necesidad de garantizar una transición ordenada para empresas y trabajadores. “La jornada de 40 horas llevó a este resultado de hacerlo de manera gradual… En 2026 las empresas harán las adecuaciones necesarias para garantizar la jornada de 46 horas y así sucesivamente, reduciendo dos horas hasta llegar al 2030”, dijo desde Palacio Nacional.
Sheinbaum Pardo añadió que la evidencia internacional —incluyendo casos recientes en países nórdicos— muestra que jornadas más cortas pueden traducirse en mayor productividad, incluso en sectores de servicios.
Por su parte, Baruch Bolaños, detalló que la iniciativa es resultado de un proceso de diálogo social de cinco meses, que incluyó más de 40 mesas de trabajo en todo el país y la participación de 2,000 representantes del sector empresarial, sindical, académico, gubernamental y organizaciones civiles. “La reducción de la semana de trabajo tendría que ser el resultado de un amplio consenso… para ello nos instruyó la presidenta”, señaló.
La propuesta continuará en la discusión técnica y se retomará en comisiones en los próximos días, donde se espera que se analicen impactos por sector y alternativas de transición.
Beneficios esperados: salud, productividad y equilibrio de vida
El gobierno expuso argumentos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y estudios comparativos internacionales que muestran beneficios como:
- Disminución de la fatiga y de los accidentes laborales.
- Mejor salud física y mental.
- Mayor equilibrio entre vida personal, familiar y laboral.
- Incrementos en la productividad de las empresas.
De acuerdo con datos de la ENOE del Inegi, 13.4 millones de personas trabajan actualmente más de 40 horas semanales y serían beneficiadas directamente.
(CON INFORMACIÓN DE: EL ECONOMISTA)




