Obispos nigerianos ven “una esperanza” en la acción militar contra ISIS
Por primera vez en 15 años, no se reportaron atentados contra iglesias durante las festividades navideñas
Morelia, Michoacán, 30 de diciembre de 2025.- Responsables de la Iglesia católica en Nigeria han recibido con una mezcla de alivio y prudencia la reciente intervención militar de Estados Unidos contra objetivos del grupo terrorista ISIS en suelo nigeriano. Según informes de ACI África, esta operación conjunta entre Washington y el Gobierno local representa un cambio significativo en la lucha contra la insurgencia que ha azotado al país africano por más de una década.
La intervención, anunciada por el presidente Donald Trump el pasado 25 de diciembre, se centró en el estado de Sokoto, al noroeste de Nigeria, y fue confirmada por el Ministerio de Asuntos Exteriores nigeriano como un esfuerzo coordinado para desarticular células yihadistas.
Una Navidad en paz tras 15 años de violencia
Uno de los datos más reveladores tras los ataques fue compartido por el padre Patrick Alumuku, director de Comunicaciones de la archidiócesis de Abuja. El sacerdote destacó que este 2025 fue el primer año en casi tres lustros en el que no se registraron ataques contra iglesias durante las celebraciones de Navidad.
Tradicionalmente, grupos radicales han utilizado las festividades cristianas para perpetrar masacres de alto impacto. La ausencia de violencia en esta fecha fue interpretada como un signo de la eficacia de la cooperación internacional y un respiro para la población civil.
Postura de la jerarquía eclesial
Los líderes religiosos destacaron dos puntos fundamentales sobre la intervención:
- Legitimidad y Cooperación: El obispo Emmanuel Adetoyese Badejo, de la diócesis de Oyo, valoró que la acción fuera conjunta. Esto evita que la medida se perciba como una imposición externa y ayuda a mitigar la polarización interna en Nigeria.
- Reconocimiento de la Crisis: Aunque el Gobierno nigeriano ha evitado usar el término «genocidio», la solicitud de ayuda externa confirma la gravedad de la inseguridad en el norte, marcada por el bandolerismo y el terrorismo.
“La operación ha sido bien recibida tanto por cristianos como por musulmanes. Es un posible indicio de un cambio de enfoque tras 15 años de terrorismo”, señaló el obispo Badejo.
Realismo frente a idealismo
El análisis eclesial desde el terreno también marcó una distancia crítica con las interpretaciones románticas que a veces se hacen desde Europa. Mientras algunos comparan los conflictos actuales con la «Tregua de Navidad de 1914», los líderes en Nigeria subrayan que la realidad del yihadismo moderno no admite tales analogías.
Para la Iglesia en Nigeria, la paz no ha llegado por un gesto simbólico entre bandos, sino por una acción decidida que rompe el ciclo de impunidad que ha costado miles de vidas en la región.
Mientras en Occidente suelen evocarse imágenes románticas de treguas históricas —como la de 1914 entre trincheras—, la realidad en el frente de lucha contra el terrorismo islamista en África es radicalmente distinta. En el contexto de la reciente intervención militar en Nigeria, analistas y líderes eclesiales subrayan que el yihadismo no suspende su violencia por respeto a la Navidad; por el contrario, la ha convertido en su objetivo principal.
La planificación deliberada de atentados contra iglesias y fieles cada 25 de diciembre no es una coincidencia, sino una estrategia para golpear el corazón simbólico de la cristiandad.
Contra la «lectura ingenua» del conflicto
Presentar la amenaza de grupos como ISIS bajo la lente de «pausas humanitarias» o «diálogos espontáneos» es, para los expertos, un error que desdibuja la naturaleza del problema. El análisis destaca puntos clave sobre la conducta terrorista:
- Sometimiento, no diálogo: El fundamentalismo radical no busca el entendimiento mutuo, sino la imposición mediante el terror.
- Uso del símbolo: La Navidad es utilizada para maximizar el impacto psicológico y mediático de las masacres.
- Realismo moral: Reconocer la necesidad de una respuesta firme no es una apología a la guerra, sino una medida de protección a la población civil.
“Confundir la misericordia con la inacción o el deseo de convivencia con la negación del mal es una forma de desprotección hacia las víctimas”, señalan los reportes desde la zona de conflicto.
El valor de un «respiro real»
Para los obispos y sacerdotes nigerianos, la valoración positiva de las recientes acciones militares coordinadas no proviene de una ideología belicista. Su postura nace de la experiencia traumática de ver comunidades masacradas y templos incendiados durante más de una década.
| Perspectiva Externa (Europa/América) | Realidad en el Terreno (Nigeria) |
| Analogías de treguas históricas | Amenaza permanente de masacres |
| Discursos abstractos de paz | Exigencia de defensa de la vida |
| Visión simbólica de la Navidad | Alivio real por la ausencia de bombas |
Conclusión: Una exigencia moral
La paz en regiones como el norte de Nigeria no se logra con gestos románticos, sino con la desarticulación de las redes de violencia. La ausencia de ataques en esta Navidad 2025 no fue producto de una tregua voluntaria del ISIS, sino de una contención estratégica que permitió a miles de familias vivir sus ritos en libertad. La defensa de las víctimas es, por tanto, una exigencia moral que precede a cualquier debate teórico sobre el conflicto.
(CON INFORMACIÓN DE: INFOVATICANA)
