Con ayuda arbitral, Barcelona logra histórica remontada ante PSG
Tremendo lo ocurrido en el Camp Nou. La principal conclusión es que el Barcelona, aunque parezca mentira, obró –de la mano del árbitro- el milagro ante el París Saint-Germain y se ha clasificado para cuartos de final de la Champions pese al 4-0 que recibió en el partido de ida
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Barcelona, España, 08 de marzo de 2017.- Tremendo lo ocurrido en el Camp Nou. La principal conclusión es que el Barcelona, aunque parezca mentira, obró –de la mano del árbitro- el milagro ante el París Saint-Germain y se ha clasificado para cuartos de final de la Champions pese al 4-0 que recibió en el partido de ida.
A partir de ahí, un sinfín de lecturas: los azulgranas se beneficiaron de un arbitraje casero y lamentable, pero también de un planteamiento absolutamente cobarde de Unai Emery.
Lo del árbitro alemán Deniz Aytekin, una vergüenza, se inventó dos penales a favor del Barcelona y omitió señalar dos a favor de París Saint-Germain, el primero de ellos muy claro, además de que perdonó una expulsión a Neymar.
Una broma de mal gusto. Como también lo fue la mayoría de los goles concedidos por el PSG, como por ejemplo la mirada estatuaria del portero Kevin Trapp —tuvo una noche horrorosa—.
Tras el 4-0 de la ida, había que salir con el cuchillo entre los dientes. Luis Enrique apostó por la defensa de tres (3-4-3), con Mascherano, Piqué y Umtiti —tres centrales, con los laterales Jordi Alba y Sergi Roberto en el banquillo—, mientras que Iniesta acompañó en el centro del campo a Rakitic, Rafinha y Busquets. Arriba, la intocable MSN. Emery, por su parte, dejó en el banquillo a un Di María que llegaba a la cita entre algodones, y su equipo lo acabaría pagando muy caro.
La noche empezó francamente bien para los intereses azulgranas con el gol de Luis Suárez a los tres minutos, después de un error defensivo del PSG. Se desató el delirio en un Camp Nou a reventar. El equipo culé olió pronto la sangre y pasó a encerrar a su rival, que jugó con un planteamiento cobarde, encerrado en su área. Cagón, por qué no decirlo.
Tras un posible penal a favor del PSG que el árbitro no señaló, al cortar Mascherano un balón con la mano dentro del área, llegó el primer aviso de la noche a cargo de Neymar, quien a la postre se acabaría erigiendo en héroe azulgrana. De quien apenas había noticias era de Messi, aunque el argentino sí lo intentó en la primera mitad con un par de lanzamientos de falta que salieron desviados.
El PSG, encerrado en su área y tratando de cazar alguna contra suelta. Cuando parecía que la primera mitad se iba a cerrar con mínima ventaja barcelonista, llegó el 2-0 poco antes del descanso. Fue en una acción de fe de Iniesta, que le ganó un balón a Marquinhos y puso un pase de tacón dentro del área para que fuera Kurzawa, que pasaba por allí, introdujera el balón en su portería al intentar despejarlo. 2-0 en el minuto 40. Había que marcar otros dos con 50 por delante.
Nada más comenzar la segunda mitad, primer penalti inventado de la noche: Meunier se resbaló dentro del área y Neymar, siempre pícaro, se echó encima de él para caer dentro del área. El colegiado Deniz Aytekin no señaló penalti en primera instancia, pero sí lo hizo segundos después tras consultar con su asistente.
El caso es que Messi no perdonó desde los once metros y ponía a los suyos a un gol de empatar la eliminatoria.
Emery reaccionó —nunca es tarde si la dicha llega, aunque al final su equipo se acabara ahogando en la orilla— y metió en el campo a Di María por un eastroso Lucas Moura. Y el PSG lo agradeció, ganando en velocidad con la presencia del argentino en el campo y empezando a generar ocasiones de peligro. El primer aviso fue un tiro al palo de Cavani. Los peores augurios se acabarían confirmando minutos después con el gol de los galos, obra del Matador después de aprovechar una dejada con la cabeza de Kurzawa, ganándole la partida por alto a un Rakitic que pudo hacer más.
La ilusión azulgrana se apagaba con ese 3-1 porque, entonces, el equipo de Luis Enrique tenía que marcar tres goles más para pasar la eliminatoria, y el reloj rápidamente corría en contra de sus intereses. De hecho, Cavani tuvo en su botas el segundo, sólo dos minutos después, en un mano a mano con Ter Stegen, que estuvo soberbio en lo poco que se le exigió, mientras que Di María, a cinco minutos del final del tiempo reglamentario, fue objeto de un posible penalti por parte de Mascherano cuando ya encaraba a Ter Stegen y se preparaba para marcar el 3-2. Otra fechoría más de Aytekin, que veinte minutos antes le había perdonado la roja a Neymar por una durísima patada por detrás a Marquinhos.
Para entonces, Emery quiso nadar y guardar la ropa, metiendo en el campo a Aurier y Krychowiak para reforzar la defensa, pero entonces llegó la magia al Camp Nou con los tres goles de la remontada. Y en los tres fue decisivo Neymar, el mejor jugador de la noche gracias a que no fue expulsado. El brasileño transformó con maestría una falta para marcar el 4-1 en el minuto 87 —aunque también contó con la colaboración de Kevin Trapp, que pudo hacer bastante más—, y en el 90 transformó un penalti después de que Aytekin se inventara un inexistente derribo de Marquinhos a Luis Suárez, que acabó desquiciado (5-1).
Faltaban cinco minutos y aún había tiempo para el sexto gol, para el milagro. Una remontada que llegó en el 95′ en otra acción con la firma de Neymar. El brasileño colgó un balón al área y, allí, Sergi Roberto fusiló a un Trapp que protagonizó una salida horrorosa. 6-1, la mayor remontada en la historia de la Copa de Europa. El Barcelona estará en cuartos de final. De aquella manera, sí. Con ayudas arbitrales y colaboración del rival, pero el sueño del triplete vuelve a estar más vivo que nunca.
Ficha técnica
FC Barcelona, 6: Ter Stegen; Mascherano, Piqué, Umtiti; Busquets, Iniesta (Arda Turan, min.65), Rakitic (André Gomes, m.84), Rafinha (Sergi Roberto, m.76); Messi, Luis Suárez y Neymar
Paris Saint-Germain, 1: Trapp; Meunier (Krychowiak, m.92), Thiago Silva, Marquinhos, Kurzawa; Rabiot, Verratti, Matuidi; Lucas Moura (Di María, m.55), Draxler (Aurier, m.75) y Cavani
Goles: 1-0, m.3: Luis Suárez; 2-0, m.40: Kurzawa, en propia puerta; 3-0, m.50: Messi, de penalti; 3-1, m.61: Cavani; 4-1, m.87: Neymar; 5-1, m.90: Neymar, de penalti; 6-1, m.95: Sergi Roberto
Árbitro: Deniz Aytekin (Alemania). Mostró tarjeta amarilla a Matuidi (m.5), Draxler (m.14), Cavani (m.43) y Verratti (m.94), del PSG; y a Piqué (m.23), Busquets (m.36), Rakitic (min.61), Neymar (m.64) y Luis Suárez (m.67), del Barcelona