Arquidiócesis de Morelia a favor de respetar el derecho a la vida

Morelia, Michoacán, 31 de octubre de 2020.- El pasado miércoles 28 de octubre, la Comisión de Salud y Asistencia Social del Congreso de Michoacán propuso tener mesas de debate con los grupos que se han pronunciado a favor y en contra de legalizar los abortos en la entidad.

El arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos se sumó y llamó a los actores políticos y sociales, a promover el diálogo y la civilidad, ante un tema tan importante y delicado como lo es la despenalización del aborto.

Así mismo, invitó a los grupos pro-vida y a los grupos que apoyan legalizar los abortos, «a no confrontarse, a respetar las diferentes posturas y posicionamientos, porque todos somos seres humanos que merecemos respeto y dignidad”. 

Carlos Garfias agregó: “Invito a los grupos pro-aborto a unirse a este llamado de diálogo y civilidad, para que se sumen a decir: sí a la vida, sí a la cultura de la vida”. 

El líder religioso recordó que el Papa Francisco en su reciente encíclica Fratelli tutti, en el número 190, dice que “la caridad política se expresa también en la apertura a todos”.

Detalló que principalmente aquel a quien le toca gobernar, está llamado a que hagan posible el encuentro, y buscar la confluencia al menos en algunos temas. “Saber escuchar el punto de vista del otro facilitando que todos tengan un espacio”. 

Garfias Merlos indicó que el Sumo Pontífice también nos llama a defender la vida humana en cada una de sus etapas: 

«La altura espiritual de una vida humana está marcada por el amor, que es el criterio para la decisión definitiva sobre la valoración positiva o negativa de una vida humana. Todos los creyentes o no, necesitamos reconocer esto: lo primero es el amor, lo que nunca debe estar en riesgo es el amor, el mayor peligro es no amar». 

El arzobispo de Morelia recalcó que la Iglesia Católica seguirá proclamando la sacralidad de la vida humana. 

“El Evangelio de la vida está en el centro del mensaje de Jesús. Acogido con amor cada día por la Iglesia, es anunciado con fidelidad como buena noticia a los hombres de todas las épocas y culturas”, abundó.

Para Carlos Garfias, “se ha de garantizar el respeto incondicional, desde el primer momento de su existencia, que moralmente se le debe al ser humano en su totalidad y unidad corporal y espiritual: El ser humano es persona desde el instante de su concepción y, por eso, a partir de ese mismo momento tiene los derechos de la persona, principalmente el derecho inviolable a la vida, que es el primer derecho”. 

Detalló que todo hombre abierto sinceramente a la verdad y al bien, aun entre dificultades e incertidumbres, con la luz de la razón y no sin el influjo de la gracia, puede llegar a descubrir en la Ley Natural escrita en su corazón el valor sagrado de la vida humana desde su inicio hasta su término, y afirmar el derecho de cada ser humano a ver respetado totalmente este derecho que le corresponde desde el principio.