¿Cómo definir el estilo de un espacio con objetos decorativos?
Para sentirnos a gusto con un espacio, nuestro estilo personal debe reflejarse en cada rincón. Cualquier detalle, hasta un reloj de pared, debe ser coherente con nuestros gustos y necesidades espaciales y estéticas.
Buenos Aires, Argentina, 27 de abril de 2022.- Darle personalidad a los espacios que habitamos es fundamental para sentirnos a gusto en ellos. Tanto nuestra oficina como nuestra habitación o la sala de comedor puede experimentar cambios significativos de estilo que se traducen en bienestar para quienes los habitamos.
Es cierto que reformular una habitación requiere de una gran inversión. Sin embargo, a veces un reloj de pared o unas cuantas figuras decorativas pueden dar un aspecto más satisfactorio. Solo debemos definir un estilo y buscar los elementos adecuados para lograrlo.
A continuación, compartimos las claves para definir el estilo de un espacio con poco presupuesto, sumando algunas figuras decorativas.
Identificar nuestro estilo ideal
Para sentirnos a gusto con un espacio, nuestro estilo personal debe reflejarse en cada rincón. Cualquier detalle, hasta un reloj de pared, debe ser coherente con nuestros gustos y necesidades espaciales y estéticas.
En primer lugar debemos eliminar todo aquello que no nos produzca placer. Luego, podemos buscar figuras decorativas para el hogar, cojines y otros elementos que nos gusten más.
Pensar un diseño coherente con el espacio
La coherencia con el espacio disponible es fundamental, tanto por sus dimensiones como por la forma. Si el espacio es amplio con juegos de niveles, podremos colocar muchas figuras decorativas, mientras que un lugar reducido y llano nos invita a crear una alternativa minimalista.
Estudiar la composición
Cuando hablamos de estilo, nos referimos a una composición que guarda cierta lógica. Este es un punto que no podemos obviar al incorporar figuras decorativas.
Si buscamos un estilo tradicional, podemos preferir colores neutros, cuadros al óleo y un reloj de pared elegante. Para un espacio moderno, podemos optar por un reloj de pared digital, colores fríos y una decoración sobria.
No perder practicidad
Por más impronta personal que deseemos plasmar en nuestro espacio, no podemos olvidar la comodidad de uso. Con esto nos referimos también a la facilidad de desplazamiento y limpieza.
Si decoramos nuestra oficina, por ejemplo, es preferible tener un reloj de pared grande y visible y adornos sencillos. Si, en cambio, queremos añadir figuras decorativas para sala, podemos jugar más con los colores y texturas.
Revisar el mobiliario
Antes de incorporar objetos decorativos, es importante revisar los muebles disponibles. Así sabremos si es posible moverlos del lugar, restaurarlos o prescindir de los que no armonizan. hecho esto, podremos identificar las posibilidades de estilo que podemos poner en juego.
Usar la creatividad expresiva
La creación o incorporación de un estilo propio involucra una gran creatividad para poner en escena un universo simbólico. En primer lugar, la ubicación y visibilidad del reloj de pared, TV y otros dispositivos dice mucho de un lugar, si invita al descanso o a la actividad, por ejemplo.
También podemos lograr un estilo diferente combinando elementos aparentemente incompatibles o volver decorativos algunos utensilios. En estos casos, debemos tener especial cuidado de no exagerar y lograr una visión confusa del espacio.
Con solo algunas figuras de decoración o relojes de pared podemos cambiar y renovar el aspecto de nuestros espacios.