DestacadasEditorialesPolítica

Vox en México. El debate en la oposición.

Ha sido muy oportuna la visita de Abascal a México porque la oposición está a tiempo de definir qué postura presentará en las siguientes elecciones: una candidatura consensuada o dos, una progre y una conservadora

Morelia, Michoacán, 10 de septiembre de 2021.- Al presidente López Obrador, ese maestro de las cortinas de humo, le cayó como anillo al dedo (AMLO dixit sobre la pandemia) la visita del líder español Santiago Abascal a México. Ésta le ha dado munición suficiente para hablar de Vox y de la oposición mexicana durante todo el fin de semana y principios de esta semana y no de los problemas del país.

El presidente y sus seguidores no han reparado en emitir los clásicos e infundados adjetivos que nos han imputado a todos los que no comulgamos con las ideas socialistas que se pregonan en México desde la misma Revolución Mexicana. No creo, sin embargo, que se den cuenta de la verdadera importancia de la visita de Abascal.

En principio debemos subrayar el enorme paso que dio Santiago Abascal para apuntalar todo un movimiento anti-comunista en el mundo hispanoparlante (que ellos llaman “la Iberósfera”). La Carta de Madrid que fue lo que al final han firmado políticos y liderazgos sociales (y no su adhesión a Vox) es una hoja de intenciones que se declara a favor de la democracia y del estado derecho. Es apenas un tímido avance hacia una futura coordinación contra totalitarios y dictadores, pero es especialmente importante por ser la primera y la única iniciativa en este sentido.

En segundo lugar, en México se abrió un debate que se encontraba latente: ¿qué oposición existe en México? Es claro que ni gobierno, ni oposición son un monolito ideológico. Lo que ha unido hasta ahora a los opositores es el evidente peligro que representa López Obrador a la economía y a la democracia mexicana, pero no han definido un proyecto de gobierno que sustituya al actual.

Algunos políticos de derechas y la parte institucional de Acción Nacional (la cual está dominada por liber-progres) se apresuraron a criticar la visita de Abascal y la firma de la Carta de Madrid, la cual seguramente no han leído porque de otro modo no se entiende su rechazo. Lo que asustó de esta visita a estos políticos de “derechas” fue la clara postura que ha tenido Vox en España: conservadora en lo social y liberal en lo económico. Vaya, como el PAN de los presidentes Fox y Calderón.

Como sea, ha sido muy oportuna la visita de Abascal a México porque la oposición está a tiempo de definir qué postura presentará en las siguientes elecciones: una candidatura consensuada o dos, una progre y una conservadora.

El principio del ocaso de López Obrador

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba