Adiós, adiós querido amigo Gabo / Rigoberto Márquez
¿Por qué te fuiste así de repente? sin avisar, sin dejar una nota, una nota que hubiese dicho vuelve pronto, como niño te fuiste sin decirnos adiós, y tras estas líneas exijo a petición de todos los mortales se maldiga la muerte aunque sea por muerte natural
Morelia, Michoacán, 17 de abril de 2014.- Y tras estas líneas exijo a petición de todos los mortales se maldiga la muerte aunque sea por muerte natural. Adiós, adiós querido amigo Gabo:
Gabriel García MARQUEZ, como todo buen MARQUEZ, era un buen Gabriel.
Amigo MARQUEZ, ¿por qué te fuiste así de repente? sin avisar, sin dejar una nota, una nota que hubiese dicho vuelve pronto, como niño te fuiste sin decirnos adiós, y tras estas líneas exijo a petición de todos los mortales se maldiga la muerte aunque sea por muerte natural.
Si en el paso la dama de negro, con apellido muerte, te guiñase el ojo, por mí, por los cientos que te lloramos, follatela desesperadamente, como si quisieras quebrarla, a donde vayas no tengas olvido de la memoria de tus putas ni cien años bastan aunque sean de soledad para olvidarte, si llegaras a un cielo blanco y te recibiera un buen ángel, cuéntale una buena historia de esas que dejas contar pero si acaso fuese un torbellino de oscuro y cálido sabor a acido, sentad te en la mesita de espera y léete un buen libro de Octavio O de Monsiváis, y por favor no entres, espera a Elenita, no tarda en llegar.
Mi querido amigo, nos presentaron tarde, tú ya viejo y sin paciencia, yo joven e inquieto, pero ten en cuenta que a partir de hoy, eres mi invitado en esa mesita donde yace Michel, Kafka, Mario puzo, Molier, Octavio, Monsiváis, Jesucristo, Buda, Mohamed, Ali, Zorrilla, Miguel de Cervantes, te sentaras a la diestra de Oscar Wilde.
Detesto que estés en mi mesita de lectura, quisiera que estuvieras vivo, pero en verdad te juro mi querido Gabo, que en este cuarto llamado biblioteca pública de mi casa, podrás hablar con el niño de Tepito MONSIVAYS para que te cuente lo q nunca escribió, jugaras con Quijote y visitaras enfermos imaginarios, descubrirás la homosexualidad de Oscar, sabrás que el padrino Mario puzo tiene su mafia en el cielo, y que Federico nietzsche aún se masturba por las mañanas por el complejo de Beethoven de nunca escuchar la voz del amor.
Descubrirás el amorío secreto de Leonardo da Vinchi con Vicent Van Gogh y que de noche en esa mesita de lectura maldigo al que no nos presentó a tiempo, pero vete en paz mi querido Márquez, que a tus 98 años no fumaba, no tomabas, no follabas y que tu único libido perverso fetichismo era el de ese olor viejo de libro, de paso dile a Octavio y a Monsiváis que ya no sean tan traviesos en mi mesita de lectura.
Descanse en paz el artesano de letras, el cuenta cuentos, descanse en paz el maldito Gabo que se fue sin dejar ninguna nota.