De Primera Mano / Centenario del Ejército Mexicano
Todos sabemos que grupos políticos y criminales sistemáticamente presentan las quejas contra el Ejército y otras autoridades con la intención de desacreditarlos; si los críticos de las fuerzas armadas fueran objetivos en sus cifras, reconocerían que la inmensa mayoría de las quejas carecen de sustento
Morelia, Mich., 22 de octubre de 2013.- Hace unos días, el pasado 17 de octubre, el pleno del Congreso del Estado de Michoacán aprobó por mayoría un acuerdo para inscribir con letras doradas en el frontispicio del recinto legislativo la leyenda “Centenario del Ejército Mexicano 1913-2013”, en homenaje a la heroica labor que realizan las fuerzas armadas del país.
No faltaron, como siempre, los sistemáticos detractores de la noble institución, algunos de los cuales por el adoctrinamiento que reciben o por proteger quien sabe cuáles intereses aviesos se opusieron al acuerdo con los argumentos que aprendieron de memoria.
No voy a mencionar en este breve espacio los detalles de la molestia de algunos diputados y sectores con la intención de reconocer al Ejército Mexicano, pero lo que sí es que se hablaba de 8 hechos que se atribuían a la milicia mexicana, algunos de los cuales más bien podrían deberse a errores humanos y no a la institución emblemática para todos los mexicanos, además de que otros sólo caen en el terreno de la especulación.
Me llamó la atención cómo a los detractores de las fuerzas armadas se les llena la boca de decir que cada vez son más las quejas que se presentan contra el Ejército, asegurando que en los últimos 7 años se han presentado más de 11 mil 500 de estas quejas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), pero sin aclarar que en todo ese tiempo la inmensa mayoría de las denuncias no han prosperado.
Todos sabemos que grupos políticos y criminales sistemáticamente presentan las quejas contra el Ejército y otras autoridades con la intención de desacreditarlos, pues tal vez en un descuido alguna pegue. Si los críticos de las fuerzas armadas fueran meticulosos y objetivos en sus cifras, también deberían decir que más del 99% de las quejas no derivan en recomendaciones, por lo que podrían ser falsas, no fundamentadas o contener algún vicio de origen.
Sí, es verdad que el Ejército Mexicano puede cometer errores, no como institución, sino en la medida que está comandado por civiles y conformado por humanos, quienes sin embargo en su gran mayoría cuentan con una disciplina y lealtad hacia el país a toda prueba.
Pero si en 100 años de historia hay 8 hechos generales que se les recriminan a nuestros soldados, todos los días realizan tareas para la salvaguarda de los mexicanos, muchas de ellas sin publicidad o sin que busquen o cuenten con los reflectores de aquellos que salen a criticarlos.
En consecuencia, yo no me opongo al homenaje del Congreso del Estado, al contrario, lo considero insuficiente para una institución como el Ejército Mexicano que debería ser reconocida como un símbolo de unidad de los mexicanos, al mismo grado que nuestra bandera, nuestro himno, y más arriba, mucho más arriba que nuestra selección de fútbol o nuestros artistas, a quienes a veces idolatramos.
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