De Primera Mano / Michoacán…, no adelantemos vísperas
No adelantemos vísperas ni nos confundamos, en materia de seguridad estamos algo más tranquilos, pero en materia social sólo hemos recibido anuncios de acciones que no se han reflejado en hechos y que, por lo tanto, no han dado resultados
Morelia, Michoacán, 28 de noviembre de 2014.- Las acciones de las fuerzas federales del orden y sus resultados, así como la designación de un comisionado nacional, la cada vez más frecuente presencia de funcionarios federales y los acuerdos con los grupos de autodefensa aún no pueden calificarse como “resultados concretos” del apoyo federal en Michoacán, ni de la coordinación entre las instancias de los tres niveles de gobierno.
En los últimos días hemos visto expresiones triunfalistas de algunos actores políticos y sociales, que dicen que ahora sí la estrategia federal de seguridad funcionó y que hoy sí Michoacán puede ver de manera esperanzadora hacia el futuro.
Es verdad que ya, en materia de seguridad, hay algunos resultados, pero… ¿quién podría afirmar que los efectos serán permanentes y que las cosas no volverán a ser como antes o peores cuando se vayan las fuerzas federales? Porque se van a ir, no nos han dicho cuándo, pero es precisamente por ello que ahora están adiestrando a más de mil policías municipales de 27 municipios en las instalaciones militares de Tlaxcala.
No adelantemos vísperas ni nos confundamos, en materia de seguridad estamos algo más tranquilos, pero en materia social sólo hemos recibido anuncios de acciones que no se han reflejado en hechos y que, por lo tanto, no han dado resultados.
Los resultados que han dado las acciones de las fuerzas federales son sólo los primeros pasos para generar las condiciones que propicien la reactivación de la economía y que se puedan poner en marcha una serie de programas sociales, pero de ninguna manera se podría decir que los problemas de Michoacán ya están resueltos o en vías de resolverse.
La delincuencia y la inseguridad no tienen límites territoriales específicos y las acciones del gobierno federal se han concentrado fundamentalmente en 27 municipios de 113 con los que cuenta Michoacán, y aunque se han llevado a cabo blindajes en los estados vecinos, los mismos gobernadores de esas entidades han señalado que la vigilancia se ha reforzado en sus límites con tierras michoacanas.
Esto implica que la delincuencia y la inseguridad que también existe en esos estados no está siendo combatida de la misma manera en aquellas demarcaciones y, por lo tanto, el que eventualmente se liberara de dichos problemas a Michoacán no sería un triunfo mientras en otros puntos sigan operando grupos delincuenciales que seguramente buscarían aprovechar el vacío o la debilidad de aquellos a los que sí se está combatiendo.
No nos apresuremos a cantar victoria. Sí se ven los primeros resultados, pero son sólo los primeros pasos de lo que seguramente sería un muy largo proceso.
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