De Primera Mano / Mucho ruido…
El resultado de la semana pasada fue el mismo que muchos preveíamos: El gobernador Fausto Vallejo se ausentará por 6 meses más y se confirmó a Jesús Reyna como gobernador interino
Morelia, Mich., 23 de julio de 2013.- Desde hace más de una semana era un hecho que el gobernador constitucional de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, solicitaría una nueva licencia a su cargo como producto del periodo requerido para su recuperación tras la operación a la cual fue sometido.
Ya incluso se había filtrado a los medios de comunicación la cantidad de días adicionales requerida, 180, lo que pese a la incertidumbre que generaba la falta de una comunicación oficial debió abrir el terreno al cabildeo y la negociación.
Con la poca información disponible los partidos empezaron el debate en los medios de comunicación, sobre todo el PRD y el PAN, unos muy aventurados en sus suposiciones y los otros más reservados, precisamente ante la falta de información.
Lo que pasó la semana pasada ya fue ampliamente comentado, la conformación de un frente único de los partidos de oposición, que se opondría a una nueva licencia, sumando 23 de los 40 votos en el Congreso del Estado; la presentación de la solicitud ante el Poder Legislativo y su turno a las comisiones de Gobernación y de Puntos Constitucionales, lo que puso nerviosos a algunos.
Baste recordar que la de Gobernación, presidida por el diputado priísta Olivio López Mújica tardó 9 meses y medio para designar alcalde de Nahuatzen, pero afortunadamente ahora sí había límite de tiempo y toda la atención de la clase política como para evitar este tipo de retrasos.
Después de charlas privadas con el gobernador interino, Jesús Reyna, la bancada del PRD se separó de aquél bloque que se oponía a otorgar la licencia y fue de esa forma que los 17 diputados del PRI y 8 de los 9 integrantes de la bancada perredista hicieron mayoría para el domingo, y después de un duro debate, aprobar no una nueva licencia, sino una ampliación por el mismo periodo de 180 días que se había solicitado.
Así, los diputados del PRD justificaron su postura argumentando que se mantuvieron firmes en rechazar la aprobación de una nueva licencia, pero en cambio aprobaron una ampliación de la ya existente, lo que para efectos prácticos es lo mismo que si se hubiera aprobado la solicitud original.
En resumen, vimos a un gobierno estatal especulador; una bancada priísta que apenas logró una apretada mayoría para un tema de mucha importancia; una bancada perredista que cambió su postura y trató de salir bien librado; una bancada panista que se mantuvo en contra, pero al final se plegó a la decisión de la mayoría; y a los diputados sin bancada que cayeron en la exageración de pedir un dictamen médico para poder decidir un asunto que por muchas razones era impráctico.
Al final el resultado fue el mismo que muchos preveíamos: El gobernador Fausto Vallejo se ausentará por 6 meses más y se confirmó a Jesús Reyna como gobernador interino. Así pasa muchas veces con nuestra clase política: Reclaman, señalan, amagan y negocian, para que al final todo quede igual.
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