El bloque de Ricardo Monreal

Morelia, Michoacán, 19 de mayo de 2025.- Las declaraciones de Gerardo Fernández Ñoroña, ante la situación actual que vive el lopezobradorismo en aras de reivindicar al movimiento, han llegado, paradójicamente, a fortalecer a la fracción parlamentaria de Morena en San Lázaro. El fin de semana, en un evento que muy a menudo sucede para abrirle las puertas a cientos de jóvenes de todo el país, Ricardo Monreal, fiel a su estilo, dedicó unas palabras de aliento a Arturo Ávila, una de las voces más visibles de la cámara baja. Y como el parlamento de Jóvenes Dialogando por la Transformación está teniendo un impacto positivo ante la opinión pública, el espaldarazo, en este preciso momento, afianzó más la carrera por la gubernatura de Arturo Ávila en Aguascalientes.
Aun cuando los tiempos son prematuros, esa atmósfera preelectoral ha comenzado a sentirse con gran intensidad. Para muchos, apoyándose en el liderazgo de Ricardo Monreal, hombre de mucha sapiencia y trayectoria en décadas, resulta un buen guía. Eso, incluso, se lo reconocieron todos los senadores en la pasada legislatura. La mayoría de ellos, pese al clima de polarización que se formó por el destape de las propias corcholatas, le dieron su voto de confianza al zacatecano para seguir coordinando las tareas y, de paso, que fuese reconocido cómo uno de los aspirantes para la sucesión presidencial.
Eso nos dio a entender que, más allá de todo, su aportación era indispensable por todas las razones que hemos puntualizado. En ese caso, no tuvimos ninguna duda de ello, Monreal había construido un bloque no solamente para atender los temas de agenda legislativa, sino para apuntalar un grupo compacto a puestos de elección popular. No es un secreto a voces la cercanía que tiene con muchos gobernadores que, en su momento, formaron parte de esa camada que respaldó a capa y espada a Ricardo, incluyendo en los momentos de mayor atención.
Recuerdo, por ejemplo, a Eduardo Ramírez y Alejandro Armenta. Ellos dos, en la recta final del proceso legislativo, siempre manifestaron su respaldo a Ricardo Monreal. Hoy, en Chiapas y Puebla, uno y otro gobierna con enorme legitimidad. A lo que vamos es que, con ese vínculo de cercanía, el impulso del líder de San Lázaro sumó, en el espacio y el tiempo perfecto, para qué se afianzaran en la recta final de una encuesta. Después, claro está, Monreal tuvo el propio reconocimiento de Claudia Sheinbaum al nombrarlo uno de los coordinadores territoriales que, en tareas específicas, estuvo a cargo de la organización y logística de 16 entidades federativas. Esa primera impresión, y con una razón de fondo, supimos que Ricardo, para los próximos tres años, sería coordinador de la fracción parlamentaria. Para ese entonces, ya caminaba una estructura que, a la postre, integrarían la columna vertebral en la cámara baja. Uno de ellos, que también fue fundamental en el armado, fue el mismo Fernando Castro Trenti.
Entonces la plataforma, que comenzaba a dibujarse con los personajes más cercanos a Ricardo Monreal, se asomaba bajo su liderazgo. Bajo esa connotación, que por supuesto muchos la comparten por la función que realizan, podemos aludir al nombre de Arturo Ávila. Él, que también forma parte de esa gran estructura que es afín al coordinador, es una de las piezas claves, sobre todo los trabajos de vocería. Él propio Ricardo, en una entrevista previa al diálogo de los Jóvenes, lo calificó como uno de los personajes con una inteligencia que se logra distinguir por su capacidad discursiva ante la opinión pública no solamente en el parlamento, sino en varias mesas de análisis donde, por cierto, deja al descubierto las fechorías de la oposición. Eso, desde luego, le abre una posibilidad enorme de continuar afianzándose, concretamente en la carrera interna de Morena por la gubernatura de Aguascalientes.
Eso, nos da la impresión, es una situación cantada, sobre todo cuando Arturo Ávila, hecho a la medida, constituye ese relevo generacional que tanto énfasis hizo el expresidente López Obrador. A su vez, queda claro, los números le favorecen en todas las encuestas de opinión pública que han salido a la luz, máxime aquellas que confirmaron mayor exactitud en la pasada elección presidencial. Desde luego que habrá que esperar para confirmar esa tendencia tan elevada que, a su vez, le ha permitido superar con gran margen a los posibles aspirantes. La diferencia, además de la proporción numérica, también radica en esa capacidad que muestra en cualquier espacio donde debate y analiza temas de la agenda con periodistas de renombre.
Y hoy, que consideramos a Arturo Ávila parte sustancial de ese bloque de Ricardo Monreal, sobre todo para apoyarse en la operación legislativa, sale a flote en el momento perfecto, máxime ante las declaraciones que realizó el presidente de la mesa directiva del Senado de la República. De hecho, eso no provocó ningún impacto negativo, al contrario, diría que fortaleció a Ávila porque dejó ver su habilidad para responder a los señalamientos y, de paso, se sujetó a la unidad que ha pedido Claudia Sheinbaum para encarar todo lo que vendrá en puerta. Desde ese punto de vista, en Aguascalientes, podemos aludir que las cosas pintan muy bien, pues respaldos como el de Ricardo Monreal, que son gestos que siempre hay que resaltar, sirven para afirmar que, en esa carrera interna, Ávila tendrá el respaldo de liderazgos de mucho peso al interior del partido.
Así lo relata esa lógica de los hechos que, a todas luces, debemos reconocer, es el preludio de una carrera sobresaliente para una de las voces más elocuentes del movimiento lopezobradorista. Hablo, desde luego, del vocero de la fracción parlamentaria de Morena, y pieza crucial del armado estratégico de Ricardo Monreal en San Lázaro.
Monreal refrenda su liderazgo como coordinador en San Lázaro