El Chapo, va de nuez / Teodoro Barajas Rodríguez


Joaquín Guzmán Loera ha sido recapturado, insistimos se trata de un acierto que no hace olvidar las anteriores fugas, mismas que dejan hondas huellas de la maquinaria de la corrupción y la deficiencia que se hicieron más ostensibles
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Morelia, Michoacán, 08 de enero de 2016.- Joaquín Guzmán Loera “El Chapo” fue capturado de nueva cuenta, el despliegue mediático ha sido más que ostensible porque no se detiene todos los días a un individuo de la magnitud del famoso narcotraficante que ya en dos ocasiones se ha fugado de penales de alta seguridad para exhibir la podredumbre en algunas autoridades que jamás supieron explicar cómo se registraron dichos actos que dejaron un pestilente tufo a corrupción.
La detención del Chapo es un acierto, eso es indiscutible, la recaptura del narco da la vuelta por el mundo máxime que ahora todo se globaliza al instante. De nueva cuenta regresará al Centro Federal de Readaptación Social número 1 El Altiplano, el mismo sitio del que ya se fugó hace unos meses para volver a ser fugitivo.
El acierto de la recaptura, en el que jugó un papel importante la Secretaría de Marina, ha motivado el beneplácito de diversos países, particularmente Estados Unidos, ya casi nadie recuerda que dos veces se fugó el Chapo, si, exhibió doblemente a las autoridades que no supieron a qué hora se fue.
En la administración del panista –creo que ya es ex panista- Vicente Fox, Joaquín Guzmán se fugó del penal de Puente Grande en Jalisco, escurrió el bulto y nadie supo cuál sería el siguiente capítulo, ni la futura narrativa del señor del crimen.
El año anterior fue nuevamente capturado y remitido al penal que se ubica en Almoloya en Estado de México, la información oficial es que se fue a través de un túnel. Nadie supo, nadie sabe cómo se realizaron las obras que concluyeron con ese surrealista escape.
La detención llega el día en que el dólar hace ver su suerte al peso mexicano, el tipo de cambio más desfavorable en los últimos tiempos; el mes entrante arribará a México el Papa Francisco, el secretario de Gobernación dijo, candoroso, que el sumo pontífice de la iglesia católica traerá la paz a México, nunca explicó cómo.
Muchos comentarios, caracteres en gran cantidad en redes sociales crean y recrean conjeturas que sólo reflejan la desconfianza, la cual se ha ganado el gobierno federal por muchos desatinos, teorías de la conspiración que nunca prueban nada pero siembran dudas.
Probablemente Estados Unidos agilice las medidas legales correspondientes para gestionar la extradición del capo “más buscado del mundo”, tal vez se quede en el penal federal que ya conoce, todo puede suceder.
Joaquín Guzmán Loera ha sido recapturado, insistimos se trata de un acierto que no hace olvidar las anteriores fugas, mismas que dejan hondas huellas de la maquinaria de la corrupción y la deficiencia que se hicieron más ostensibles. Si nuestro país fuera verdaderamente de leyes no habría tan nebulosas historias que cantan victorias discutibles para regatear la credibilidad.