El momento clave de Ricardo Monreal
Desde la casa de transición de Claudia Sheinbaum, Monreal se reúne cada semana con ella para abordar temas de interés nacional. Es evidente la coordinación y el trabajo colaborativo de ambos.
Morelia, Michoacán, 19 de agosto de 2024.- Muchos analistas, equivocadamente, daban por sepultada la carrera política de Ricardo Monreal. Recuerdo que, hace exactamente tres años, la tensión puso muchas veces a prueba la sagacidad de Monreal. Pero, a estas alturas, quién puede asegurar que la política y los vaivenes son siempre color de rosa. De hecho, los grandes referentes, en un determinado lapso de su trayectoria, viven altibajos. Algunos otros, por ejemplo, son objeto de señalamientos, hostilidad y una serie de fabricaciones como parte de los confines que envuelven este tipo de ambientes. Varios actores que no soportan la presión, en efecto, son presa fácil de los ataques mediáticos. Desde luego, eso ha mermado o hasta socavado el propósito de construir un currículum en el sistema sociopolítico de nuestro país.
Por supuesto, Monreal ha vivido en carne propia la infamia y la hostilidad. De igual forma, recibió el ataque sistemático que, evidentemente, impactó fuerte, sin embargo, jamás doblegó al coordinador de los senadores de Morena. De hecho, por méritos propios consiguió colocarse en la encuesta de participantes por la candidatura presidencial, al ser fundamental su trayectoria como precursor y arquitecto del proyecto de transformación. Lo es, naturalmente, desde hace muchas décadas cuando abanderó la izquierda en el estado de Zacatecas. Para muchos, incluyendo al redactor de la columna, significó el despegue del liderazgo que, una vez más, ha dejado claro. Eso explica demasiado de lo que ahora constituye el poder político de Ricardo Monreal.
A estas alturas del proceso de transición del gobierno electo de Claudia Sheinbaum, su protagonismo ha tomado más fuerza. Monreal está de regreso y, por mucho, sigue siendo uno de los referentes de mayor peso político en México. Es por ello que, en esta misma fase, la ganadora de los comicios le ha delegado labores importantes, específicamente operando tareas determinantes para apuntalar la agenda legislativa. Es, a grandes rasgos, el único personaje que tejió acuerdos a lo largo y ancho del país para el proyecto de reforma al poder judicial. De hecho, logró recorrer cada una de las entidades para reunirse con gobernadores y legisladores electos, donde es cada vez más fuerte el respaldo que le muestran para que encabece la coordinación de los diputados en San Lázaro. Él, desde el norte hasta el sur, tiene el apoyo incondicional. Prueba de ello son los foros de análisis que, en efecto, son la llave del acceso para encontrar coincidencias y alimentar propuestas.
Y en este momento de mayor lucidez político de Ricardo Monreal, aparece en la primera línea junto a la presidente electa, Claudia Sheinbaum. Con un juicio muy objetivo, se percibe que Monreal, hoy por hoy, es hombre de todas las confianzas de la ganadora de los comicios presidenciales. La clave de todo estuvo en el trabajo eficaz que realizó en tiempos de campaña, propiamente desde la coordinación y planeación territorial. Se trató de una encomienda crucial para propiciar las condiciones en cada acto público al que acudió Claudia. En palabras más simples, el zacatecano se ha ganado un lugar para apuntalar la construcción del segundo piso de la cuarta transformación. Además de ello, sea cual sea el tema de interés, y considerando la experiencia acumulada, Monreal está en el primer círculo donde se toman las decisiones más importantes para el país.
Desde la casa de transición de Claudia Sheinbaum, Monreal se reúne cada semana con ella para abordar temas de interés nacional. Es evidente la coordinación y el trabajo colaborativo de ambos. Si a eso le sumamos los buenos resultados que le entregará Ricardo Monreal desde el legislativo federal, su protagonismo se afianzará más en la medida que los meses avancen. De hecho, podemos decir que, hoy por hoy, el zacatecano, una vez más, nos ha demostrado su poder político que lo mantiene en el nivel más alto. Él, fiel a su estilo, seguramente ofrecerá entrega y frutos a corto, mediano y largo plazo.
Es verdad que hace unos meses vivió momentos complicados. Aun así, jamás amagó con tirar la toalla. Es más, con esa seguridad que le caracteriza, mostró su mejor versión. Hoy, con otras condiciones políticas, Ricardo Monreal vive un momento estelar de su exitosa carrera. Será coordinador de los diputados y, de paso, partícipe en la construcción del segundo piso de la llamada cuarta transformación. Al existir un panorama prometedor, qué importante es continuar dando seguimiento al trabajo que lleva a cabo el zacatecano. Es, evidentemente, el mejor operador político que hay en México. Para tal efecto, esa sagacidad probada y comprobada, por razones muy poderosas de capacidad, será la punta de lanza para aprobar todas las leyes y proyectos de modificación al marco constitucional, tal y como lo ratificó por su paso en el Senado de la República.