Los suspirantes… Uno menos; ¡quedan nueve!

El IEM confirmó que el Partido Humanista perdió su registro como partido estatal, ya que tampoco lo conservó a nivel nacional; Nueva Alianza y Encuentro Social estuvieron a punto de perderlo, pero lo conservaron con su votación nacional y el PT la libró

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Morelia, Michoacán, 29 de enero de 2016.- Uno menos, pero aún quedan nueve partidos políticos con registro en Michoacán.

El Consejo General del Instituto Electoral de Michoacán (IEM) confirmó la cancelación del registro del recientemente creado Partido Humanista (PH), ya que ni en Michoacán ni a nivel nacional alcanzó el 3% de la votación total, requisito para garantizar que tiene representatividad.

Lo anterior, no hace más que confirmar que fue mala la campaña y malo el candidato que ese instituto político eligió como candidato a la gubernatura, en el académico Gerardo Dueñas Bedolla, que nunca despuntó y terminó llevando a su partido a un precipicio sin salvación.

Otros que en otras circunstancias habrían perdido el registro después de las campañas de 2015 son Nueva Alianza y Partido Encuentro Social (PES), ya que en Michoacán tampoco alcanzaron el 3% requerido de la votación.

Con la legislación electoral anterior, ambos institutos habrían perdido el registro como partidos políticos locales, pero con la nueva norma lo conservan, toda vez que a nivel nacional superaron la barrera legal en cuanto al número de sufragios recibidos.

Sin embargo, ninguno de ambos institutos políticos que postularon en su momento a Silvano Aureoles Conejo para la gubernatura accederán a financiamiento público estatal, y tendrán que sufragar sus gastos sólo con las prerrogativas que les envíen sus dirigencias nacionales, de aquello que les corresponda en financiamiento público nacional.

Otro partido que estuvo en la tablita y se salvó sólo por “un pelito de rana rasurada” fue el Partido del Trabajo (PT), que en Michoacán apoyó a Silvano Aureoles, pero a nivel nacional estuvo a punto de perder el registro por unos pocos miles de votos y sólo hasta que se realizaron los comicios extraordinarios de Aguascalientes fue que alcanzó el añorado 3%.

Tan compleja estuvo la cosa para los petistas, que incluso su dirigente estatal, Reginaldo Sandoval Flores, ya había solicitado el registro como partido político estatal, lo que finalmente, para su alivio y el de sus huestes, no fue necesario.

Con la votación muy superior al 3% que el PT obtuvo en Michoacán y con la salvada a nivel nacional, este instituto político sí alcanzará financiamiento público.

Por su parte, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) obtuvo más del 3% de la votación en Michoacán y en el país, consiguiendo así su principal objetivo, que era conservar el registro, pese a que en el caso de los comicios michoacanos, para su campaña el equipo de la candidata a la gubernatura, María de la Luz Núñez Ramos, se valió de defraudar a decenas o tal vez centenas de proveedores.

Mención aparte merece Movimiento Ciudadano, que por primera vez sin alianzas y con Manuel Antúnez Oviedo como candidato a la gubernatura, rebasó con creces el 3% que le demanda la ley, y hasta se dio el lujo de meter un diputado y de ganar cuatro presidencias municipales.

En tanto, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), que como siempre se alió con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) para impulsar al gobierno de Michoacán a Ascensión Orihuela Bárcenas, a poco estuvo de haber alcanzado cuatro curules por primera vez en su historia en la entidad.

Donde falló el cálculo fue al postular a casi puros conocidos priístas para diputados locales, lo que fue interpretado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) como un “fraude a la ley”, por lo que le retiró a los ecologistas dos diputaciones plurinominales y se las entregó al PRI.

De los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), así como del citado PRI, poco hay que hablar en estos temas de la conservación de registros, pues el primero, con Luisa María Calderón Hinojosa, obtuvo menos votos de los que esperaba; el segundo, con Silvano Aureoles, fue el gran ganador de la elección a la gubernatura, y a alcaldías; y, el tercero, pese a ser derrotado en los comicios a gobernador -con Chon Orihuela como abanderado-, y en presidencias municipales, resultó ser a la postre el gran ganador en curules locales.

¡En fin!, como decía, ¡uno menos!, pero nos quedan ni más ni menos que ¡nueve partidos políticos qué mantener! De veras… ¿necesitamos tantos?

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