Unidad o punto de quiebre en Zacatecas
Aquellos que están financiando la guerra sucia en contra de Saúl Monreal pierden su tiempo y dinero. Es sencillo: el pueblo determinará quién será su representante.
Morelia, Michoacán, 30 de junio de 2025.- Estamos a prácticamente un año que comience el proceso previo con miras a elegir a los representantes populares que irán en las boletas en las elecciones democráticas que habremos de tener en 2027. De hecho, los propósitos que se ha fijado la dirigencia nacional de Morena, en ese lapso importante, es obtener el mayor número de espacios y, por ende, la totalidad de las entidades que tendrán transición del ejecutivo estatal. La propia Luisa María Alcalde, que asumirá el reto de refrendar el paso dominante que ha ido acumulando Morena, mostró, hace unos días, algunas tendencias que, desde luego, son ampliamente positivas para el partido guinda. Eso, por la relevancia que ha tomado hoy en día, ha puesto principal acento, especialmente en aquellos aspirantes que, es un hecho, levantarán la mano para participar porque, más allá de todo la atmósfera que se ha generado, el pueblo los sigue colocando en la cima de las preferencias.
El caso del Senador Saúl Monreal, por cierto, es el ejemplo más claro de lo que hoy podemos percibir. De entrada, hay una guerra sucia que, en complicidad con algunos medios de comunicación, sale de las oficinas de funcionarios de la administración de Zacatecas. En este mismo período, claro está, se propagó una andanada sistemática y sincronizada que, en sí, se centró en la narrativa de hacer creer una posible salida de Morena, aspecto que desmintió el legislador. Eso es el resultado del efecto que ha provocado Saúl con ese liderazgo que, con el paso de los meses, ha ido afianzando a lo largo y ancho de la entidad. Hace poco, que veíamos a detalle los registros de algunas encuestas, el menor de los Morena, tan sólo en el mes de junio, creció en la perspectiva de apoyo. Eso significa que, de a poco, se mantiene con esa tendencia a la alza.
Muchos pensaron que el impacto de las decisiones tomadas en el consejo sería un golpe fulminante para Saúl Monreal. Eso, precisamente ahora que el clima de hostilidad sigue fluyendo, paradójicamente ayudó más al senador. Debido a ello, es importante realizar una reflexión profunda de ese fenómeno que, a nuestro juicio, tiene una explicación clara. De entrada, la sociedad detesta las estrategias perniciosas, máxime cuando son usadas para manchar la imagen de los actores. Siendo así, lo único que sí lograron fue, a todas luces, meter de lleno a Saúl en la carrera por la gubernatura, especialmente en apoyo popular. Entonces eso provocó, en ese salto, que ahora sean más sectores sociales de la población los que inclinen la balanza por él.
Eso le da mayor fortaleza a Saúl Monreal para llegar a la previa de una encuesta que, pese a lo establecido, no está definida del todo. Es decir, falta la opinión de las dirigencias nacionales que han acompañado la causa del lopezobradorismo. De hecho, Morena no se puede dar el lujo de menospreciar la suma de ambas estructuras para encarar un reto de esa naturaleza. La encuesta del Heraldo, por ejemplo, mostró que la oposición avanzó un tramo importante en Zacatecas. No es algo que puede prender las alarmas, pero sí una situación de que deben poner principal acento ahora que se vendrá con todo una etapa previa de definiciones. Es verdad, sigue existiendo una conexión de la población con la izquierda, pero se asocia más al trabajo que realiza Claudia Sheinbaum en aquel enclave.
Lo que también podemos observar, pese al terreno que ha ganado Morena, es un latente punto de quiebre si las circunstancias se dieran bajo una exclusión en ese mosaico de participación. Pongámonos en el peor de los escenarios de una ruptura de Saúl con Morena, y el abanderamiento con otra fuerza política para ir por la gubernatura. Esta decisión, por supuesto, tendría que ser calculada para saber la magnitud del impacto. Saúl, en ese sentido, tiene datos precisos de la capacidad de convocatoria y, por ende, lo que representaría una posible salida si ese fuese el caso. Precisamente allí, no tengo la menor duda, la última palabra la tendría el grueso de la gente. Eso lo notamos en casos específicos como el de Coahuila, donde hubo una cerrazón para sellar una coalición. O el mismo episodio que aconteció en Veracruz hace poco, donde el PT triplicó su intención del voto y, en ese tesitura, Morena perdió terreno pese a ganar municipios importantes. Pudo haber arrasado pero, ante la negativa de construir alianzas, se abrió una brecha para que otras fuerzas ganaran presencia.
Me inclino más por la postura que ha tomado Saúl Monreal en dejar en manos de las dirigencias nacionales la decisión de consolidar una sola expresión para participar en Zacatecas. Ya vimos, está el ejemplo de Veracruz, que las direcciones estatales tienen muchos conflictos de intereses, en especial de los gobernadores en turno que ejercen cierta influencia. Revisamos a detalle lo que pasó en Chiapas a la hora de proponer perfiles para la encuesta. De los cinco actores que pasaron el primer filtro en ninguno figuró el actual mandatario, Eduardo Ramírez, puntero de todas las encuestas en ese momento. Debido a la fuerte presión, el CEN no tuvo más remedio que incluirlo en la evaluación final que, a la postre, resultó fructífera para él, sobre todo por la proporción de votación que alcanzó con el 80%.
Por eso aquellos que están financiando la guerra sucia en contra de Saúl Monreal pierden su tiempo y dinero. Es sencillo: el pueblo determinará quién será su representante. Hoy, esa oleada de respaldo, recae en la estructura del senador de Zacatecas.
