Cartelera Retrospectiva / Cosmópolis
Esta producción hace evidente el talento de Cronenberg al trabajar con un material difícil; desgraciadamente por grandes lapsos resulta tediosa e incomprensible.
Morelia, Mich., 25 de junio de 2013.- Aunque ya pudimos verla durante la décima edición del Festival de Cine de Morelia y también en la más reciente Muestra de la Cineteca, hizo escala nuevamente ahora en la cartelera comercial de nuestra ciudad Cosmópolis (Cosmopolis, 2012), del experimentado cineasta canadiense David Cronenberg, como parte del concepto Sala de Arte de Cinépolis. La cinta ha generado sentimientos encontrados desde que fue presentada el año pasado en el Festival de Cannes y ha tenido un recorrido importante en el circuito de salas dedicadas a la exhibición de filmes con pocas posibilidades de éxito monetario.
Cosmópolis, está basada en la novela del mismo nombre del escritor norteamericano Don DeLillo y que está editada en español por Seix Barral. Don DeLillo es considerado como uno de los máximos representantes vivos del posmodernismo literario de los Estados Unidos. De entrada, ni la novela ni la adaptación cinematográfica cuentan una historia convencional: la del millonario Eric Packer quien se traslada de punta a punta en la isla de Manhattan, a bordo de su limusina, buscando un buen lugar para efectuar un corte de cabello.
El viaje es complicado, en ese mismo momento el presidente está de visita en la ciudad y las manifestaciones anarquistas están a la orden del día. Por si fuera poco, el joven Packer está a punto de caer en bancarrota debido a una serie de malas inversiones en el mercado de valores.
Durante el recorrido entrará en contacto con distintos personajes: su esposa distante (y también millonaria), un médico que le hace un examen prostático dentro del auto, su asesora financiera que hace ejercicio por el parque y diferentes amantes con las que sostiene relaciones sexuales mientras la limusina sigue avanzando. Un vistazo al final de los tiempos del sistema económico que nos ha tocado vivir.
La principal carta de presentación de Cosmópolis, al menos para el gran público, es el rol protagónico interpretado por Robert Pattinson, quien no lo hace tan mal como en Bel Ami (recientemente también en cartelera), lo que habla más del buen trabajo de Cronenberg que de la aptitud de Pattinson. Aunque hay que decirlo, la película está plagada de actores mucho más experimentados como Juliette Binoche, Samantha Morton, Paul Giamatti y el francés Mathieu Almaric.
Esta producción hace evidente el talento de Cronenberg al trabajar con un material difícil. Desgraciadamente por grandes lapsos resulta tediosa e incomprensible. El cineasta canadiense tiene una prolífica e interesante trayectoria con trabajos como Crash (1996), Una historia violenta (A history of violence, 2005) y la más reciente Un método peligroso (A dangerous method, 2011), que dan muestra de su capacidad, pero da la impresión de que el cineasta se guardó lo mejor de sí para otra ocasión.