A 41 años, la Procesión del Silencio de Morelia, toda una tradición
El recorrido solemne que se hace enmedio de la oscuridad, viste a las calles y a los 11 balcones visitados por los creyentes de color púrpura como signo de penitencia durante la Cuaresma, mientras que los asistentes, que se espera este año alcancen los 35 mil, con velas en las manos hacen que la caminata se convierta en un recorrido emblemático
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Morelia, Michoacán, 13 de abril de 2017.- Desde el año 1976 cuando se realizó la primera procesión del Silencio en la ciudad de Morelia, cada año ha ido creciendo hasta convertirse a la fecha y a 41 años, en toda una tradición michoacana donde más de dos mil personas se organizan para llevar a cabo la logística del recorrido que inicia en la calzada Fray Antonio de San Miguel y culmina, en el templo de Capuchinas pasando por la catedral Metropolitana donde el Arzobispo en turno le da el pésame a María, la madre de Jesús, la cual vio morir a su hijo en la cruz luego de que fue sacrificado horas antes.
El recorrido solemne que se hace enmedio de la oscuridad, viste a las calles y a los 11 balcones visitados por los creyentes de color púrpura como signo de penitencia durante la Cuaresma, mientras que los asistentes, que se espera este año alcancen los 35 mil, con velas en las manos hacen que la caminata se convierta en un recorrido emblemático.
Son 22 cofradías de parroquias, de movimientos apostólicos, particulares y de algunas colonias las que participan en este evento católico que hacen gala de organización, debido a la buena disposición de quienes participan de manera voluntaria que al ser cada día más grande, deben de apoyarse en las autoridades de Turismo, de Seguridad, de Bomberos y de Protección Civil para el cierre de vialidades, para apagar las luces de las calles por las que pasa la procesión e incluso, para apoyar en caso de que se presente algún conflicto.
Cabe recordar que el único año que ha cambiado la dinámica de la Procesión fue en el año 2009 justo después de los granadazos de aquel mes de septiembre del 2008 sucedidos en la Plaza Melchor Ocampo durante la ceremonia del Grito de Independnecia cuando en señal de duelo, la caminata se realizó con las luces encendidas pero por la presión de la misma gente, tuvieron que ser apagadas ya que la solemnidad no era la misma con ese escenario.
Entre los colores que se utilizan durante el Viernes Santo resalta el color rojo que significa la realeza de Cristo así como su sangre derramada en la Pasión, el Morado o Púrpura, es un signo de penitencia durante la Cuaresma mientras que el color blanco, significa el color de la alegría con la que se anuncia su resurrección y todo ello, se podrá vivir este viernes a partir de las 7 de la tarde-noche durante el recorrido que se hará desde la llamada Calzada de San Diego hasta el templo de Capuchinas.