PT y las elecciones intermedias en Michoacán
Reginaldo Sandolval es, como muchos protagonistas del proceso de transformación, una carta fuerte para contender por la gubernatura de Michoacán

Morelia, Michoacán, 10 de marzo de 2025.- Hoy, que todo gira en torno al ejercicio electoral en el que se jugarán 16 gubernaturas, el clima se torna cada vez más interesante, pues estamos, pese al tiempo que resta, inmersos en una dinámica previa que, desde ahora, está movilizando a los principales protagonistas del proceso de transformación. Eso, lo hemos visto en tierra y redes sociales, se proyecta en cada uno de los actos públicos e intervenciones con la prensa local. Tenemos muy claro, tal y como aconteció en aquel destape de las corcholatas, que las piezas del ajedrez han comenzado a moverse estratégicamente para ir midiendo el pulso de la población. Lo que es un hecho, más allá de la decisión que se tome a través de una encuesta, es que la coalición Seguimos Haciendo Historia, que refrendará su alianza en 2027, irá en bloque para doblegar nuevamente al conservadurismo.
No existe ninguna duda, más allá de las crispaciones que muy a menudo sucede en las coaliciones, que habrá un bloque que unifique a las izquierdas en Michoacán. Es mejor, queda claro, una unión que sume a favor, que un experimento que erosione a la militancia. Me refiero a que, como tal, no veo una sociedad pactada con el PRI y PAN, al menos en tierras purépechas. Hay en ello, además de muchas fracturas internas, una polarización de puntos de vista. Guillermo Valencia, actual líder del PRI en la entidad, no pactará ningún acuerdo con Alfonso Martínez en la carrera por la gubernatura. Cada uno, por su cuenta, tendrá que asumir el reto de buscar efecto entre la población civil y, por ende, jugársela con una sola estructura, pues el PRD, es casi un hecho, inclinará la balanza con Morena.
Está cantado: el PAN irá solo con Alfonso Martínez; el PRI, pudiese ser el caso, puede perfilar a su dirigente estatal, Guillermo Valencia. Entonces el dilema, por supuesto, concentra las miradas a la coalición Seguimos Haciendo Historia en Michoacán. Hoy, que esa alianza parte como la favorita para refrendar el triunfo electoral del 2021, la carrera por la coordinación de la defensa del voto, en esa lucha sin cuarteles, se vuelve un verdadero desafío. Siendo así, el único inconveniente, por así decirlo, recaerá en la decisión que brote de la encuesta que aplique Morena. La dirección estatal, por ejemplo, ha esbozado algunos perfiles de mujeres. Faltan, evidentemente, la lista de hombres que tengan una posibilidad real de competencia.
Allí, por supuesto, la coalición Seguimos Haciendo Historia tendrá que ratificar el compromiso de flexibilidad y apertura para la competencia. Hay, evidentemente, simpatía por muchos cuadros de Morena; sin embargo, antes que nada, se debe priorizar el derecho legítimo de participación. Debemos saber que, como tal, el PT, siendo fundamental para el triunfo histórico del 2021, tendrá que tener su representante en la evaluación final que levante la comisión nacional de encuestas del CEN. He ahí, con una lógica que se impone por muchas circunstancias, que la mejor carta que tiene el Partido del Trabajo, por liderazgo y trayectoria, es la del coordinador de la fracción parlamentaria del PT en San Lázaro, Reginaldo Sandoval. Y él, que desempeña un papel preponderante como guía en la cámara de diputados, tiene el poder y la estructura política para medirse, naturalmente, a la ponderación y cuestionarios que aplique el CEN.
En cuanto a esa posibilidad, con mucha más razón en un universo político como el que vivimos, no hay que descartarla, pues el PT, por esa fuerza que movilizó a la población civil en grandes proporciones el pasado dos de junio, tiene muchos elementos a favor para ir en busca de la candidatura de la izquierda en Michoacán. Y Reginaldo, además de la suficiente madurez que ha mostrado en este tipo de coyunturas, no hay que descartarlo en esta coyuntura previa que, en sí, ha comenzado ya. Lo más justo sería, a nuestro juicio, que el PT pudiera encabezar una gubernatura de las 16 que estarán en juego. En esa toma de decisiones, en definitiva, no podemos pasar por alto el Solio de Ocampo.
Lo que sí es un hecho, en esa lectura clara de la realidad sociopolítica que reina a nivel nacional, es el compromiso de ir juntos en coalición, pues el PT, como fuerza política consagrada en el país, se ha vuelto fundamental en todo el tramo de la lucha democrática que encabezó Andrés Manuel López Obrador. Eso hay que recalcar, especialmente en vísperas de un proceso electoral. Me refiero al consenso que habrá por los espacios de participación en ayuntamientos, diputaciones locales y federales, lo mismo que la gubernatura. Y Reginaldo Sandoval es, desde luego, una de las cartas para medirse en la encuesta interna de Morena. De no llegar a ser él, nos queda claro, el coordinador de los diputados del PT en San Lázaro, entre sus prioridades, está un senador de la República para inclinar la balanza a favor de él. Eso, de hecho, lo deslizó en una conferencia de prensa con toda la estructura política del PT estatal.
Mientras tanto, y con esa legitimidad que le ha dado esa trayectoria, Reginaldo Sandolval es, como muchos protagonistas del proceso de transformación, una carta fuerte para contender por la gubernatura de Michoacán.