Brasil es consagrado a San Miguel Arcángel en sesión solemne en la Cámara de Diputados
Diputada Simone Marquetto destacó imágenes de San Miguel y Nuestra Señora Aparecida, llamado moral

Morelia, Michoacán, 14 de agosto de 2025.- Con la imagen oficial peregrina de San Miguel Arcángel, procedente del Monte Gargano, en Italia, lugar de las apariciones del arcángel en los primeros siglos del cristianismo, Brasil fue consagrado el 12 de agosto a la protección e intercesión de San Miguel Arcángel, en una sesión solemne en el pleno del Congreso Nacional en Brasilia. La imagen también fue coronada como comandante espiritual de la nación brasileña.
La estatua fue solemnemente bendecida y llevada a Brasil, el país con más católicos en todo el mundo, por los miembros del Instituto Hesed: Sor María Joana, Sor María Raquel y el Padre Emanuel Maria, junto al obispo de Piracicaba, Mons. Devair Araújo Fonseca.
La peregrinación de la imagen en Brasil comenzó el 26 de julio, en la ciudad de Santa Bárbara d’Oeste, en el estado de Sao Paulo y diócesis de Piracicaba; y pasará por varias ciudades de las cinco regiones del país sudamericano.
«Es precisamente en este momento marcado por desafíos espirituales y morales que Brasil da la bienvenida a esta cámara legislativa a aquel cuya tradición cristiana reconoce como defensor de la fe, guardián de la Iglesia y comandante de la milicia celestial», declaró la diputada federal Simone Marquetto, quien solicitó la sesión solemne.
Marquetto enfatizó que la presencia en el parlamento de las imágenes de San Miguel Arcángel y de Nuestra Señora Aparecida, Patrona de Brasil que además ostenta el título de Generalísima del Ejército Brasileño, representa la profunda devoción de los brasileños y, más que eso, es una convocatoria, un llamado a la responsabilidad espiritual, la unidad nacional y la valentía moral para construir un Brasil fundado en valores eternos.
«Vivimos en una época en la que necesitamos recuperar nuestra fe: la fe católica apostólica romana», porque «la nación brasileña nació de una Santa Misa«, dijo la congresista.
«La presencia de San Miguel Arcángel desde el Monte Gargano, Italia, un antiguo lugar de fe, no es sólo la visita de una imagen, sino la llegada de una señal del cielo para nuestro pueblo» y «una advertencia para que retomemos el camino de la conciencia, la justicia y la fe», dijo, enfatizando que es «una clara señal de la protección divina sobre nuestras instituciones».
Al final de su discurso, Marquetto pidió que la espada de San Miguel “defienda la verdad, que su presencia inspire a los justos y que su misión nos recuerde cada día que ninguna autoridad es mayor que la de Dios y que toda autoridad sólo es legítima si sirve al bien”.
También pidió que “el Congreso Nacional, a través de este acto, se una al cielo y en este momento resuene en la historia como el día en que Brasil proclamó: ¡San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla!”.
La consagración: Momento sagrado para Brasil
“Hoy, ante la nación reunida, el cielo se inclina ante la Tierra”, dijo a su turno el Obispo de Piracicaba, Mons. Devair Araújo da Fonseca.
“En este momento sagrado ante la nación brasileña, en un gesto de fe, confiamos espiritualmente este país al cuidado del príncipe de los ejércitos celestiales. Te confiamos, San Miguel Arcángel, las llaves de esta tierra, el destino de nuestras familias, la integridad de nuestras instituciones y el alma de este pueblo que clama por protección”, dijo el prelado en la consagración.
“Que tu espada defienda nuestros hogares del espíritu de división, violencia y mentira. Que tu presencia silenciosa pero poderosa camine al frente de quienes sirven al bien común, y que Brasil escuche tu voz, despertando corazones dormidos y restaurando la fe en los heridos”, continuó el obispo.
“Que ningún proyecto contrario al Reino de Dios prospere en esta nación, y que tu vigilancia celestial desenmascare el mal, fortalezca a los justos y defienda la verdad con valentía. Luchando junto a nosotros, guíanos hacia la victoria de la luz sobre las tinieblas. Y que esta tierra, consagrada a ti, sea una señal visible de que el cielo no ha abandonado a Brasil, sino que Dios camina con nosotros”, finalizó.
“La gran reconquista”
Luego, la Hermana María Raquel, miembro del Instituto Hesed, dijo que esta consagración surge de un movimiento llamado “la gran reconquista”, que “no es sólo una campaña, sino una misión, un llamado a nuestras familias, nuestras comunidades y a toda la nación a volver a Dios, porque vivimos en tiempos en los que la fe ha sido ridiculizada, la familia atacada y la verdad relativizada”.
Sin embargo, creemos, como dijo San Juan Pablo II: “Que el hombre puede incluso construir un mundo sin Dios, pero este mundo eventualmente se volverá contra el hombre”, resaltó la monja.
«Hoy, ante las autoridades y el pueblo, declaramos pública y solemnemente que este país no camina solo, sino que está bajo la protección y el mando de aquel que en el cielo se llama el príncipe de las huestes celestiales», subrayó la religiosa.
«Este acto realizado hoy –concluyó– es un grito de fe que debe impregnar las paredes de este parlamento y llegar al corazón de Brasil, de cada brasileño, recordándonos que toda autoridad debe estar al servicio del bien común y bajo la luz de la verdad».
Coronación de San Miguel
La monja explicó luego que la corona colocada sobre la imagen de San Miguel “representa el reconocimiento público de que la lucha que estamos librando no es sólo humana, sino espiritual” sino que “representa el clamor de un pueblo que sabe que no tenemos que luchar contra hombres de carne y sangre, sino contra los principados y potestades, contra los gobernantes de este mundo de tinieblas como leemos en Efesios, capítulo 6”.
“Esta coronación es, por tanto, un acto de fe, una entrega pública de Brasil al cuidado de Aquel que siempre ha protegido al pueblo de Dios”, enfatizó la hermana. “Es la proclamación espiritual de que San Miguel Arcángel es, a partir de hoy, el comandante espiritual de la nación brasileña”.
La coronación de San Miguel fue realizada por Mons. Devair Araújo, quien rezó la siguiente oración:
“Te consagramos, San Miguel Arcángel. Te coronamos, San Miguel Arcángel, como comandante espiritual de nuestra nación, defensor de nuestras familias, guardián de nuestra libertad, escudo contra las tinieblas y patrón del Brasil fiel”.
La espada colocada a los pies de la imagen de San Miguel fue entregada por la diputada Marquetto, quien rezó: “Con esta espada, símbolo de autoridad y justicia, te confiamos a la protección de Brasil. Que se levante contra las fuerzas del mal y sea luz entre las naciones”.
Día Nacional de San Miguel Arcángel
La diputada Simone Marquetto también informó del “proyecto de ley que establece dentro del territorio nacional el día de San Miguel Arcángel a celebrarse anualmente el 29 de septiembre”, que ya ha sido radicado en la Cámara de Diputados, para que se celebre el mismo día en que lo recuerda la Iglesia Católica.
A continuación, el P. Emanuel Maria, del Instituto Hesed, dirigió el rezo del “Rosario de Combate”, que según él es “una oración que Dios inspiró” a una de las fundadoras de Hesed, la Madre Kelly Patrícia,
«El corazón de este Rosario de Combate es una oración llamada ‘Reina Augusta’, y esta oración no vino de la tierra, sino del cielo», continuó el sacerdote: “La Virgen María se apareció al Beato Padre Louis-Edouard Cestac, quien vio una multitud de demonios y le pidió ayuda y más tarde vio a Nuestra Señora y le dijo: ‘No puedes vencer a los demonios’. Ella respondió: ‘La condición de Dios es la oración’. Y él pidió: ‘Enséñanos, pues, a orar’. Y ella enseñó esta oración, que es la oración de la Reina Augusta”.
(CON INFORMACIÓN DE: ACIPRENSA)